A las cinco de la mañana, cuando el sol está muy lejos de calentar la rojiza tierra de Moa, la ingeniera geóloga Yudith García Ramírez se pone en pie para enfrentar otra jornada laboral en la empresa Pedro Sotto Alba-Moa Nickel S.A., adonde deberá entrar a las 6:45 a.m., sin que sepa exactamente la hora de salida…
Ya en la entidad equilibrará sus horas entre sus dos puestos laborales: el de secretaria general del buró sindical de la empresa Sotto Alba y el de especialista de cuadros. “A veces concluyo a las 4:15 p.m, pero hay días en que son las siete o las ocho de la noche y no he llegado a mi casa, porque esta es una empresa muy compleja”, asegura.
Cada día dedica sus primeros esfuerzos a la labor sindical. Asiste a consejillos, se actualiza del rumbo productivo de la empresa, tramita información y realiza recorridos ya sea por las minas a cielo abierto o por las áreas industriales, administrativas o de servicios, que en total agrupan a más de 2 mil trabajadores, pertenecientes a 74 secciones sindicales.
Por ese sentido de pertenencia y vitalidad, y porque es de las que coge un micrófono y, en medio de una conferencia obrera, expresa con convicción que hay que escuchar a los trabajadores y ser dirigentes sindicales preocupados y ocupados, sus afiliados no dudaron en seleccionarla como delegada directa al 22 Congreso de la CTC.
A la joven Yudith, que para mayor orgullo de Holguín, forma parte de los tres delegados directos al magno evento por el Sindicato Nacional de Trabajadores de Energía y Minas, le gratifica la confianza de sus compañeros, de representarlos dignamente.
“Los trabajadores tienen mi compromiso de seguir laborando arduamente, de defender nuestros derechos e intereses. Mientras se acerca el Congreso espero escuchar sus voces, llevar sus inquietudes a la mesa de discusiones para juntos lograr cambios significativos y fortalecer nuestro quehacer sindical”, manifiesta.