Las familias de los 16 mil 709 estudiantes, en los diferentes niveles de enseñanza, organizan lo básico — uniformes, mochilas, útiles escolares— para que el retorno a las aulas sea, como siempre ha sido, una fiesta del saber.
Por estos días finales de agosto directivos del Mined en la suroriental provincia de Santiago de Cuba puntualizan cuestiones relacionadas con las garantías materiales y humanas para la arrancada del curso 2024-2025.
Bien saben ellos, y la familia también, que la garantía de una etapa docente-educativa exitosa se fragua desde el primer día, de ahí que alistarse para el gran momento deviene cuestión de prioridad.
En el tiempo por venir será básico lo que escuela-familia-comunidad logren en materia de formación integral de los educandos, con énfasis en el fomento de valores morales y éticos, así como una coherente labor política-ideológica.
En el orden académico seguirán como básicas asignaturas como Matemática, Español e Historia, sin desdeñar el resto de las materias, que como Inglés e Informática, revalorizan su importancia en el espectro curricular de los alumnos a todos los niveles.
El reencuentro con compañeros de estudios, el conocer otros amigos, además del aprendizaje de contenidos nuevos, figuran entre las motivaciones de quienes serán el centro del interés de septiembre a julio.
Con todo listo en Santiago de Cuba para el gran día de clases volverá el bullicio a las escuelas y el futuro de la nación a moldearse de la mano de maestros y familia.
Acerca del autor
Periodista cubana. Máster en Ciencias de la Comunicación. Profesora Auxiliar de la Universidad de Oriente. Guionista de radio y televisión.