Temas medulares vinculados a la economía fueron analizados esta semana en los plenos de la Central de Trabajadores de Cuba (CTC), en Ciego de Ávila y Sancti Spíritus.
El considerable atraso del plan de producción de azúcar y las acciones para mejorar en el comportamiento de este renglón fundamental de la economía, constituyeron asuntos a debate en el pleno de Ciego de Ávila.
En la molida de caña influye negativamente la inestabilidad del suministro de combustibles, interrupciones operativas y roturas por malas operaciones industriales, entre otras causas.
También conspira contra el programa provincial de fabricación del dulce grano la no arrancada hasta la fecha del central Ciro Redondo por los contratiempos de la aledaña bioeléctrica que no ha logrado suministrarle vapor y energía eléctrica, por lo cual enfrentan los desafíos de la presente temporada los trabajadores de los ingenios Primero de Enero y Ecuador.
Se evaluó también la producción de alimentos, en cuya tarea se puso de ejemplo al personal de la Empresa Agropecuaria Arnaldo Ramírez, reconocida en el encuentro como la entidad insignia de la agricultura avileña en la actualidad.
“Cuando una empresa no es productiva, incumple su objeto social, no se diversifica, desatiende las ventajas del encadenamiento productivo, no crea una casita infantil para los niños de madres trabajadoras y no implementa el sistema de pago adecuado, está comprometiendo el bienestar de sus trabajadores”, expresó Leobanys Ávila Góngora, miembro del Secretariado Nacional de la CTC. (José Luis Martínez Alejo)
Virarse para las empresas con pérdidas
El pleno de la organización en Sancti Spíritus centró su atención en el vínculo del movimiento sindical y el sector empresarial para aportar a la recuperación económica del territorio a partir del despegue productivo de sectores claves.
En ese contexto se expusieron las proyecciones de desarrollo de algunas entidades como la empresa cárnica y la agroindustrial azucarera Uruguay, ambas con perspectivas de recuperación y expansión tras las posibilidades de financiamiento extranjero.
La empresa pesquera de Sancti Spíritus, líder de la acuicultura en el país, y la unidad 5 de La Estancia, sobresalen en el incremento de las producciones físicas y la introducción de nuevos productos. No obstante esos ejemplos positivos los principales indicadores del plan de la economía tienen un saldo desfavorable. Al cierre del 2023, fueron insuficientes los rublos exportables, 19 entidades incumplieron las ventas netas, otras 13 cerraron con pérdidas y renglones como las viandas, el arroz, la carne de cerdo, la leche, la miel, el tabaco torcido y los huevos reportaron un descenso significativo.
“El movimiento sindical debe virarse para esas empresas con pérdidas en su gestión. De conjunto con las administraciones y los trabajadores encontrar las vías para salir adelante”, expresó Leobanys Ávila.
La política de cuadros ha sido el talón de Aquiles del movimiento sindical espirituano en los últimos años. Ekaterina Gowen Dickinson, secretaria general de la CTC en la provincia, se refirió a la urgencia de resolver esa problemática para incidir de manera efectiva en las organizaciones de base y contribuir a los resultados que se anhelan. (Yuleiky Obregón)
Acerca del autor
Licenciado en Comunicación Social. Economista y periodista. Escribe sobre asuntos económicos, agropecuarios, de la construcción y la cultura. Multipremiado en concursos de periodismo, festivales de la radio y otros eventos. Atesora las distinciones Félix Elmuza y Raúl Gomez García, los sellos Laureado y 50 aniversario del periódico Trabajadores, y la Moneda Conmemorativa 60 aniversario de la UPEC.
¿Cuándo los Sindicatos van a liderar el aniquilamiento del ausentismo, la impuntualidad, el desaprovechamiento de la jornada laboral, la bajísima intensidad, productividad y calidad del trabajo, que caracteriza a su masa de trabajadores afiliados?
La indisciplina laboral es, después del bloqueo genocida de EEUU, la principal causa que no permite producir los alimentos, bienes, servicios y recursos necesarios para garantizar el sustento y desarrollo de nuestra sociedad socialista.
Y entonces, ¿cuándo?