El gimnasta cubano Diorges Escobar tiene razones para abrazarse al optimismo por estas fechas. El sueño de clasificarse a los Juegos Olímpicos de París 2024 no es para nada lejano y de mantener sus buenas actuaciones en las Copas del Mundo que le restan podría al menos incluirse entre los protagonistas de manos libres.
Al nuestro lo ampara además de su reciente medalla de plata en la cita de El Cairo las buenas notas de dificultad en cada una de sus presentaciones y una sólida confianza, a pesar de su juventud.
Ahora se trasladó a Alemania para asumir a partir el 22 del actual mes la Copa del Mundo de Cottbus, en donde pudiera incrementar su puntuación rumbo a la lid parisina.
Después continuaría su adiestramiento y en abril competiría en la parada de Doha, Qatar. Ojalá, ya con la clasificación a la lid de los cinco aros en el bolsillo.
Diorges Escobar es uno de los nuevos talentos de la escuela cubana de gimnasia artística. Su actuación en los Juegos Centroamericanos de San Salvador 2023, no solo lo demostró, sino que le infundió nuevas metas, la mayoría capaz de alcanzarlas.
Lo está demostrando y eso nos vale para confiar en él.