«Venir a un lugar que se fundó hace 60 años y sentir que tienen fuerza para adelantar, que sienten que esto es realmente suyo, es muy emotivo y da fuerzas para continuar», declaró este viernes Aleida Guevara March, hija del Guerrillero Heroico, al visitar la única fábrica de alambre con púas y electrodos existente en Cuba, fundada por su padre en febrero de 1963.
La «Gonzalo Esteban Lugo», hoy unidad empresarial de base (UEB) de la Empresa de Derivados del Acero de Camagüey, fue la primera de las plantas proyectadas por el Che en Nuevitas, con el objetivo de convertir esa ciudad agramontina en un polo de desarrollo industrial. Como parte de aquel plan, en la década siguiente se establecieron allí la fábrica de cemento 26 de Julio (en 1968), la central termoeléctrica Diez de Octubre (en 1969) y el combinado químico Revolución de Octubre (en 1975).
Una representación de los casi 300 trabajadores de la fábrica de «alambre de púas», como nombran los nueviteros a la industria, recordaron el suceso y confirmaron, además, el deseo de mantener el legado del héroe.
Y es que como aseguró Ruslam Rodríguez Coronado, director de la entidad, a pesar de la crisis económica y la carencia de insumos para la conformación de derivados del acero se buscan alternativas para sostener la fabricación.
Entre esas nuevas variantes destacó el empleo de los desechos de la producción en la elaboración de jaulas para aves, de aros para la construcción, así como en la conformación de artículos de ferretería y un autoconsumo, que abastece el comedor y garantiza la venta a los trabajadores y a la comunidad.
Estos ejemplos, dijo Aleida, muestran que el Che todavía vive, porque cada una de las cosas que construyen se necesita para este pueblo. «Es muy importante, añade, la labor que desarrollan y eso fue lo que pensó mi padre cuando creó las industrias con el objetivo de conformar una clase diferente y con otro pensamiento».
El joven trabajador Jarol Cruzata Lafargue habló en nombre de sus compañeros y ratificó el compromiso de todos de continuar innovando y trabajando para que exista esta fábrica por muchos años más.
En nombre del secretariado nacional del Sindicato de Trabajadores de la Industria uno de sus miembro, Armando Álvarez Évora, leyó un comunicado donde felicitaba a la entidad y agradecía que mantuvieran al Che como inspiración.
En el encuentro dicha organización obrera entregó reconocimiento al colectivo, algo que también realizaron las autoridades políticas del territorio.
En tanto, la dirección de la UEB aplaudió la labor de la brigada que acometió acciones de reparación en la unidad de cara a la celebración.
Cuando concluyó el acto, Aleida Guevara, junto a los presentes, sembró un árbol que homenajeará el aniversario de fundada la factoría hace 60 años por el Che y compartió con los trabajadores del centro.