En misiva enviada a los miembros del Comité Noruego del Premio Nobel de la Paz, el profesor emérito de la Universidad de Montreal Giles Bibeau destacó que “la idea de que la humanidad es una sola, sirve (…) de cimiento sobre el cual reposa el internacionalismo médico cubano (…) y fiel a este principio, la Brigada ha intervenido a lo largo de los años en cuatro continentes, implementando (….) un auténtico universalismo humanitario, que ha contribuido a crear vínculos y trabajar por la paz a través de la cooperación basada en el respeto de todos los pueblos y de cada país”.
El colaborador Arnold August hizo llegar a Trabajadores el aval enviado por el profesor Bibeau al Comité del Nobel, y en él destaca cómo a pesar del bloqueo impuesto hace más de 60 años por el gobierno de EE.UU. a la Isla, “ningún otro país ha consagrado tantos recursos como Cuba (…) a la asistencia médica internacional, que se expresa a través de la asignación y el traslado de personal, donaciones, medicamentos y equipos, y de viajes internacionales”.
“No hay mejor momento, mientras el planeta lidia con una terrible pandemia, para destacar el trabajo desinteresado de los profesionales cubanos que, entre marzo y noviembre de 2020, combatieron el COVID-19 en unos 40 países y territorios (…) Las brigadas tienden puentes entre pueblos y naciones más alla de los sistemas, las ideologías y las tensiones geopolíticas”, agrega.
El escrito enviado el 15 de noviembre resume además el quehacer del Contingente Internacional Henry Reeve de Médicos Especializados en Desastres y Epidemias desde el 2005 cuando fuera fundado y anunciado al mundo por el Comandante en Jefe Fidel Castro.
“En sus intervenciones, las Brigadas Henry Reeve pusieron en práctica una visión intrínsecamente humanista de la medicina, acorde con la formación recibida en Cuba por el personal y aplicada dentro del propio país. En Cuba, el acceso a la atención, brindada con dedicación y de forma gratuita a la población, es visto como un requisito de justicia social y respeto a los derechos humanos; en las operaciones efectuadas en el exterior, estos mismos principios se aplican por deber de solidaridad”, asegura.
Según la Mesa de Concertación de Solidaridad Québec-Cuba, el Comité Noruego del Premio Nobel de la Paz Nobel, que comenzará sus deliberaciones el venidero 1ro. de febrero y tiene previsto anunciar conclusiones en octubre del 2021, aceptó la propuesta lidereada por Bibeau, quien ha realizado labores científicas en África, América Latina y Asia, lo cual le permite aquilatar la contribución humanitaria de las Brigadas cubanas.
Bibeau ha realizado más de 300 publicaciones y es experto en antropología médica, razones que se suman al por qué fue la personalidad escogida por la Mesa de Concertación de Solidaridad Québec-Cuba (TCSQ-C) para liderear el Comité de esa región canadiense que nominó a la Brigada Henry Reeve al Premio Nobel de la Paz del 2021.
La TCSQ-C fue creada en enero del 2002 y reúne a organizaciones de esa región. Forman parte de su quehacer la solidaridad con el pueblo cubano, la información sobre su realidad, la ayuda material a Cuba, así como la organización de intercambios culturales. En jornadas venideras solicitarán a otras personalidades de la academia, la política y las artes, así como del campo de la salud, que se sumen a la campaña de respaldo a la candidatura de la Brigada Médica Cubana al Premio Nobel de la Paz 2021.