Miguel Díaz-Canel: Fuerza Cuba, que estamos venciendo

Con una evocación al Che, Guerrillero legendario siempre presente en el corazón de los cubanos, inició su intervención en el programa televisivo Mesa Redonda el Presidente de la República Miguel Díaz-Canel Bermúdez, quien al adentrarse en el  modo en que Cuba enfrenta la situación sanitaria y económica de los actuales momentos expresó que son tiempos complejos, en los que hay tres frentes de trabajo muy importantes:

El enfrentamiento a la pandemia, la denuncia del bloqueo recrudecido, y el seguimiento a los acuerdos del último Congreso del Partido.

En el primero de los casos destacó la experiencia que se ha ido ganando en tal sentido, con una estrategia que calificó de eficaz, con la intervención de muchos actores, entre ellos el personal médico, los científicos, entre otros.

“Aprendiendo a enfrentar la enfermedad pudimos superar el primer pico”, comentó y detalló cuestiones referidas al rebrote, cuando se aplicaron las experiencias del primer momento, con un incremento de tres a cuatro veces en el número de pruebas de detección del nuevo coronavirus, con un índice menor de personas fallecidas.

Las diferentes etapas que se han vivido en medio del enfrentamiento a la pandemia dejaron experiencias, explicó el Presidente y dijo que hay que actualizar ya el modo en que se está haciendo frente a la enfermedad.

Al comparar la tasa de enfermos por millón de habitantes en el mundo, las Américas y en Cuba, precisó que el país está muy por debajo en ese indicador, al igual que en otros como el número de fallecidos, y con un alto indicador de personas recuperadas.

Ante este panorama es lógico que hay que hablar de una estrategia para aprender a convivir con la enfermedad, señaló el mandatario, quien explicó que están detalladas las medidas por cada etapa incorporando un código de vida frente al SARS COV2.

Explicar bien es preciso, dijo, para que la población entienda y aumente la percepción del riesgo, en medio de un virus que asecha constantemente, donde es necesario la responsabilidad individual, social, colectiva en diversos escenarios donde se mueven las personas.

Ponderó que en Cuba se ha atendido al ciento por ciento de las personas enfermas o sospechosas sin que colapsaran los hospitales, las salas de terapias y sin lamentar el fallecimiento de niños, embarazadas o trabajadores de la salud dentro del país.

Recalcó el aporte de la ciencia en la batalla contra la COVID-19 y la presencia de personal de la salud en otras naciones del mundo, con un comportamiento muy robusto de los protocolos para la atención.

Destacó la entrega de los médicos y paramédicos que han dado la batalla fuera de Cuba para salvar vidas, así como aquellos que lo hicieron dentro de la nación.

Comentó que gracias a la planificación, algo muy criticado por los enemigos de la Revolución, se han mantenido las entregas de alimentos y otros surtidos al pueblo en medio de un cierre de fronteras y un bloqueo recrudecido.

Ahora se plantea una actualización y perfeccionamiento de la estrategia en tal sentido porque enfrentar la pandemia cuesta y en preciso recuperar la vida económica y social del país, teniendo en cuenta las potencialidades y las experiencias adquiridas.

Se ha preparado una estrategia bajo principios de racionalidad, todos llamados a un nuevo modelo de vida que nos permita vivir con la enfermedad por un tiempo prolongado, con cuestiones, como aislamiento dentro del propio hogar y mucho más.

Dijo que se retomarán maneras de trabajar como las visitas a las provincias con medidas especiales de distanciamiento y al respecto pidió comprensión a la población porque se quiere intercambiar con ella, pero en sitios abiertos, sin aglomeraciones.

Mientras más responsables seamos, mejor aprenderemos a convivir con el virus y hacer sostenible lo que se ha logrado, expresó y enumeró cuestiones básicas:

Distanciamiento físico, usar la mascarilla en espacios con personas cercanas, lavado frecuente de las manos, tener la mayor higiene, seguimiento con pesquisas, incrementar el teletrabajo, y aprender a convivir con el virus usando la mejor vacuna que se conoce hasta hoy: la responsabilidad.

Este pequeño país nunca se rendirá

El Presidente cubano afirmó que el bloqueo es la principal amenaza para Cuba, por su agresividad y brutalidad. “Se manifiesta una elevación de la retórica anticubana, con acciones de persecución financiera, campañas de resquebrajamiento de la unidad y agresividad contra los dirigentes. Tratan de dividirnos. En ese sentido están dirigidos los principales programas, con mucho financiamiento”, apuntó.

Agregó que hay un ejército de mercenarios que se enfrentan a quienes se oponen a los ataques. “Pretenden silenciar voces y liderazgos, con una inyección perversa en las redes sociales.

Se ocultan los avances y progresos del país y se atacan constantemente y denigran nuestras principales fuentes de ingresos: Salud, Turismo y remesas, entre otras. El propósito no es nada oculto; tratan de provocar un estallido social en Cuba para quedar bien con la mafia anticubana”, precisó.

Díaz-Canel señaló que cuando una gran potencia reacciona así con un pequeño país, la crueldad, sencillamente se demerita, se ridiculiza y desacredita. Precisó que en menos de dos años se han impuesto 101 medidas punitivas contra Cuba.

Estrategia económica y social

Sobre la estrategia económica y social, explicó que la situación actual está caracterizada por menos entrada de ingresos, incertidumbre con el combustible, contracción de producciones de bienes y servicios, desabastecimiento en las redes de comercio, insuficiencias en la producción de alimentos, entre otros problemas

El Presidente cubano manifestó que ese contexto nos está llevando a acelerar esa estrategia, aunque no resulte fácil, sobre todo en cuanto al incremento de la producción industrial, incrementar la producción y los servicios, el fortalecimiento de la empresa estatal, el sector no estatal y el comercio.

Sobre la Tarea Ordenamiento (unificación monetaria y cambiaria) precisó que se encuentra en un momento superior con definiciones claras en sus componentes. “Se trabaja de manera muy integral en capacitar a todas las personas involucradas y en crear las condiciones en todos los ámbitos que serán impactados. Cuando se vaya a su implementación se le informará a la población cómo se va a hacer”, subrayó.

“Hay que separarse de las bolas y las falsas noticias”, señaló.

Agregó que es una tarea con carácter interdisciplinario, se han analizado todos los elementos. Ratificó que la unificación no constituye una solución mágica, pero debe elevar la productividad del trabajo y favorecer un desempeño más eficiente de las fuerzas productivas.

Confirmó que nuestro socialismo no dejará a nadie desamparado. “Si alguien queda vulnerable está definido cómo se le ayudará”, dijo Díaz-Canel e indicó que en una primera etapa se mantendrá vigente la libreta de abastecimiento.

Acentuó que el Estado cubano ratifica que garantizará los depósitos en los bancos de la población y de las personas jurídicas en todas las monedas y subrayó que ese es un principio que lo inició el Comandante en Jefe Fidel Castro y lo ha ratificado el General de Ejército Raúl Castro.

“Nadie debe tener preocupación, incluyendo a nuestros colaboradores, pues se han difundido falsas noticias de que perderán sus cuentas. No vamos a un cambio de moneda; nos quedaremos con la moneda nacional. Habrá tiempo necesario para las transacciones para convertir las monedas”, explicó.

Con tiempo, cuando se decida aplicar la tarea, daremos la información oportuna a través de los medios de comunicación. Le pedimos a la población confianza. Todos debemos estar esclarecidos, insistió.

“Es importante desestimar las bolas que pretenden desunir. He estado muy atento de todo lo publicado. Tengan confianza. Este proceso permitirá destrabar el avance de otras medidas. Se favorece el sector exportador, se propicia la correlación de precios, se crearán incentivos para el sector empresarial y propiciará el encadenamiento productivo. Habrá mayor transparencia de la contabilidad, en la corrección en los balances empresariales y los estudios de las inversiones, entre otros aspectos”, manifestó.

Anunció que se incrementarán los salarios y pensiones, entre muchos otros beneficios.

“Contamos con la confianza del pueblo y la unidad para garantizar el éxito de este proceso de carácter estratégico para el país”, acotó.

Autorreponsabilidad frente a la COVID-19

A partir del 12 de octubre se aplican las medidas dadas a conocer por el Primer Ministro de la República de Cuba, Manuel Marrero Cruz, quien en la Mesa Redonda expuso los detalles de la nueva normalidad.

Las previsiones e indicaciones ante la nueva normalidad tienen su base en el seguimiento que Cuba le ha dado a la pandemia, la cual inició en diciembre de 2019, cuestión informada oportunamente, a lo que le siguió, aún sin casos en el país, la elaboración de un plan para enfrentar la COVID-19 actualizado constantemente, con unas 497 medidas.

Cuando el 11 de marzo es declarada como pandemia el nuevo coronavirus por parte de la Organización Mundial de la Salud, en Cuba aparecen los tres primeros casos y se desata la aplicación de los protocolos establecidos para tal momento.

En junio, se presentan al Buró Político las 229 medidas establecidas para la recuperación del SARS COV2, luego aparece el rebrote y a partir de ahí ha existido una actualización del plan que ahora conduce a tres etapas con diferentes fases y la inclusión de una nueva normalidad, algo aprobado igualmente por el Buró Político del Partido en esta propia semana.

La premisa principal en todo ello es preservar la salud del pueblo, dijo el Primer Ministro Manuel Marrero Cruz.

Nada en medio de la pandemia se ha improvisado, se ha planeado y con el protagonismo de muchas personas, con el pueblo a la cabeza se ha logrado ir ajustando cada cuestión.

La experiencia acumulada, el entrenamiento del personal de la salud y de apoyo, los recursos puestos a disposición de cada momento, permiten pasar a otra etapa.

El plan tiene tres objetivos básicos: transitar a una nueva normalidad de manera gradual, mitigar el impacto económico causado por la situación internacional y el bloqueo recrudecido, y desarrollar las capacidades internas en medio de la nueva normalidad.

El nuevo plan quedaría estructurado en tres etapas o fases que incluye la fase epidémica, la fase recuperativa y la de nueva normalidad.

Los detalles al respecto los expuso el Primer Ministro explicando pormenorizadamente los requerimientos de cada una de ellas.

Al explicar la nueva normalidad dijo que es el momento en que se restablece la actividad productiva y de servicio fortaleciendo la vigilancia epidemiológica con la participación responsable de las personas con un nuevo código y estilo de vida.

Dentro de la nueva normalidad hay medidas de las tres fases que se mantienen y se precisan adecuaciones para garantizar un pleno desarrollo de las capacidades productivas y de servicios.

Importante será promover en la población la nueva normalidad con una campaña de comunicación, dijo Marrero Cruz, quien además detalló, que es obligatorio el uso del nasobuco en espacios cerrados, y en sitios abiertos que existan concentración de personas.

En la nueva normalidad se incrementa la exigencia y el cumplimiento de las medidas referida a prohibir la entrada de personas con signos y síntomas sugerentes de la COVID-19 a centros laborales o escolares, así como las acciones de desinfección de manos y superficies, y la protección con los medios necesarios del personal de la salud y aquellos en constante vínculo con personas.

La marcha de la nueva normalidad tendrá seguimiento especial parte de las máximas autoridades del país a nivel de reunión, con videoconferencias con las provincias, martes y viernes.

No se mantendrá de manera diaria la conferencia de prensa que cada mañana realiza el director nacional de epidemiología del Ministerio de Salud Pública, esta pasará a realizarse los viernes a modo de resumen semanal  de manera detallada.

Varias provincias pasarán a la nueva normalidad y allí quedarán desactivados los Consejos de Defensa, aunque en todas las del país no se abandonará la pesquisa pormenorizada, con calidad, para la detección oportuna de personas con síntomas similares a los que provoca la COVID-19, como tampoco se dejará a un lado la realización de PCR a quienes se considere necesario.

Como elemento nuevo se decide el ingreso en el domicilio, bajo aislamiento, a contacto o sospechosos de casos positivos a la COVID-19, hasta el momento se han aislados a unas 15 mil personas, con cerca del 4 por ciento que luego desarrolló la enfermedad.

De manera excepcional sí serán ingresadas personas que por sus características, conducta, o condición social no pueda cumplir con el aislamiento domiciliario.

Se implementará un programa de fortalecimiento de lo referido a la higiene, la microbiología y la epidemiología, ampliando el número de laboratorios especializados hasta llegar a que cada provincia tenga un laboratorio de biología molecular.

La vigilancia en frontera se cumplirá con apego a protocolos muy estrictos, y los viajeros llenarán, para entrar al país, una declaración de su estado de salud. Al ciento por ciento de los viajeros internacionales que arriben al país se le realizará PCR.

Marrero Cruz ofreció detalles de cómo será la atención a estas personas si salieran positivo a la enfermedad, e igualmente dio pormenores de lo que le corresponde hacer a los cubanos que están en el exterior y se le vence el tiempo establecido para el regreso al país.

Las visitas a los hospitales se suspenden como medida para la protección de los enfermos, familiares y amigos, y se exigirá el cumplimiento de las normas de bioseguridad en los centros de atención de salud, además de desarrollarse un programa de ampliación y modernización de las terapias intensivas en todos los hospitales del país.

La investigación, innovación y aplicación de las nuevas tecnologías será potenciado, al igual que varias medidas laborales, para el sector estatal como no estatal, con prioridad para seguir extendiendo el trabajo a distancia y el teletrabajo.

Medidas referidas a la atención a las personas más vulnerables y otras de carácter tributario fueron igualmente detalladas por el Primer Ministro, quien dijo que en materia de transporte solo los pasajeros con boletos podrán acceder a terminales de cualquier tipo, potenciándose la venta de pasajes de manera virtual.

Durante su intervención en la Mesa Redonda el Primer Ministro ratificó las fechas que se habían anunciado con anterioridad en cuanto a la culminación del curso 2019-2020 y el inicio del 2020-2021 tanto en la Educación General como en la Educación Superior.

En materia de espectáculos culturales y recreativos ratificó que se adecuarán con apego a las medidas de distanciamiento, en tanto existirán otras muy específicas para los bares, discotecas y la realización de fiestas.

La Habana, teniendo su características, tendrá indicadores especiales para medir la incidencia de la pandemia.

De manera resumida precisó que dos provincias quedan en transmisión autóctona: Ciego de Ávila Santi Spíritus. La provincia de La Habana pasa a la tercera fase con adecuaciones que serán dadas a conocer en breve, y pasan a la nueva normalidad el resto de las provincias, además del municipio especial Isla de la Juventud.

Nuevos estilos de vida que favorezcan la salud personal y colectiva será clave en la nueva normalidad, dijo el Primer Ministro, quien señaló códigos básicos relacionados todos con la higiene, el uso del nasobuco y el distanciamiento físico, además de otras.

Garantizar la salud del pueblo y la reactivación de la vida económica y social del país sobre la base de un seguimiento epidemiológico estricto, son cuestiones claves que finalmente precisó desde el espacio Mesa Redonda el Primer Ministro de la nación Manuel Marrero Cruz quien dijo que con la misma convicción que nos inspira el Che: Hasta la Victoria Siempre.

Nueva normalidad a partir del próximo lunes

Miguel Díaz-Canel Bermúdez, Presidente de la República de Cuba, en la parte final del programa televisivo Mesa Redonda, ratificó que a partir del lunes estaremos en la nueva normalidad.

Es un momento de abundante muestra de heroísmo cotidiano, de perseverancia y desgaste de quienes laboran en los laboratorios, de médicos, enfermeros y del personal de apoyo, de estudiantes y profesores de las universidades y de otras instituciones, quienes han ido a los hospitales y a centros de aislamiento, señaló.

“Gente común, del pueblo, ha arrimado el hombro, porque de eso depende la vida de sus compatriotas”, expresó.

Precisó que son momentos de potenciar la buena voluntad por hacer, crear y fortalecer la unidad para vencer.

“La nueva normalidad nos impone y exige muchos retos en materia de responsabilidad, por lo que no son tiempos de un abrazo físico, pero si a distancia, de reconocimiento y de cariño a los que han estado combatiendo y afrontando la pandemia”, agregó.

A nombre del General de Ejército Raúl Castro, del Partido Comunista de Cuba y del Gobierno reconoció a quienes han propiciado al milagro del enfrentamiento cubano. “Con ellos y gracias a ellos Cuba está en la pelea por hacer un mundo mejor”, acentuó.

“Para un pueblo como el nuestro, que encontró en el Socialismo su camino a la prosperidad, hay retos y desafíos enormes, pero no hay imposibles. Todo lo podemos vencer y conquistar”, dijo.

“Sí se puede. Ya nadie ni nada podrá detenernos. El amor por Cuba nos moviliza y ese amor, nos salvará”, manifestó el Presidente.

“¡Fuerza Cuba, que estamos venciendo!”, expresó finalmente.