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La trabajadora Lilia Rodríguez Hernández, residente en Cautilio Merendero, Jiguaní, Granma, dejó de trabajar, por problemas de salud, en la Agencia de Seguridad y Protección, de esa provincia, y ahora se encuentra en un verdadero limbo laboral.
Ella explica: “Me enfermo en el 2014 con un diagnóstico de insuficiencia renal crónica, diabetes, glaucoma e hipertensión, por lo que comencé con certificados médicos, ya que no podía seguir en el cargo que ocupaba.
“En tres ocasiones fui valorada por la Comisión de Peritaje Médico. En las dos primeras se me da un 4 por invalidez temporal, por seis meses y en la última se tomó la decisión que debía incorporarme a otro trabajo con las siguientes limitaciones:
“No estrés, ni estancia prolongada de pie, tampoco nocturnidad ni largas caminatas, así como no contacto con pérforo cortantes.
“Con estos impedimentos la empresa no tiene dónde reubicarme y me ponen a disposición de la Dirección Municipal de Trabajo. Me reubican en una plaza de auxiliar de limpieza, que no acepté dadas las causas descritas por la Comisión de Peritaje Médico.
“Ya perdí mi vínculo laboral con la Agencia de Seguridad, y a la hora de recoger mi expediente veo que causo baja por peritaje médico, por lo cual ninguna otra empresa me puede aceptar. Tengo 50 años y 28 de vida laboral”.
Es una persona mayor con 28 años de trabajo y con tantas limitaciones caballero lo mejor retirarla que elotearla sin faltar el respeto saludos y salud
Y con esos impedimentos, pensaron ubicarla como auxiliar de limpieza?
A donde tenían la cabeza quienes pensaron ubicarla en esa plaza sabiendo sus dolencias?
Se oyen y se ven cada cosas!!