Del aeropuerto internacional Benito Juárez hasta la hermosa sede de la misión diplomática de Cuba en México, ─ atravesando avenidas atestadas de vehículos en una de las horas picos del tráfico en esta ciudad, que contabiliza más de siete millones de autos circulando diariamente─, transcurrió el primer recorrido del presidente Miguel Díaz-Canel Bermúdez, que llegó en la tarde del viernes a la capital mexicana para participar en la toma de posesión del presidente electo Andrés Manuel López Obrador.
Sin quitarse el polvo del camino, el mandatario se reunió con miembros de la misión estatal cubana en tierra azteca, en un encuentro entrañable donde la Mayor de las Antillas volvió a vibrar en el corazón de sus hijos. Fueron los niños, hijos de nuestros diplomáticos, quienes le dieron la bienvenida con la canción que más almas isleñas estruja: “Cuba, que linda es Cuba”.
Al tomar la palabra, Díaz-Canel habló del tremendo privilegio de esta reunión, su primera actividad en suelo mexicano, a donde vino con el propósito, dijo, de reforzar y ampliar las relaciones con México, país que calificó de estratégico, convertido actualmente en el segundo socio comercial de la Isla en la región latinoamericana y caribeña, y el quinto a nivel mundial este año.
Adelantó a los presentes que este sábado transmitiría al nuevo Presidente la disposición de Cuba para trabajar junto a México con vistas a profundizar los intercambios mutuos y aunar esfuerzos por la integración regional, en tiempos marcados por la desunión.
Como sucede en todos los encuentros de este tipo que propicia el Presidente de los Consejos de Estado y de Ministros en cada país que visita, hizo una actualización sobre la vida económica, política y social de la nación, en una especie de transfusión en sangre con las noticias más urgentes de la Isla, narradas de primera mano por él.
De tal manera, los puso al corriente de la situación económica del país, marcada por tensiones financieras, producto de la persecución económica de Estados Unidos; del amplísimo proceso de reforma constitucional, en el que han participado alrededor de ocho millones de cubanos; de los temas más debatidos en cada reunión donde se discutió el proyecto constitucional, debate que ha generado la modificación de la mayoría de los párrafos originales del texto; y de las visitas que el Consejo de Ministros está realizando por todas las provincias del país, la última a la más oriental: Guantánamo.
Les compartió, además, conceptos del trabajo que considera claves: tocar los problemas con las manos, salir de las oficinas y estar en contacto directo con la gente; los directivos tienen que rendir cuentas de su gestión; para dar solución a los problemas es urgente acudir a la ciencia y la informatización; los cuadros tienen que desarrollar habilidades para comunicarse y no negar espacios significativos hoy como las redes sociales para intercambiar con el pueblo.
Habló de motivaciones entrañables como el 150 aniversario de las guerras por la independencia de la nación, los sesenta años del triunfo de la Revolución cubana y la estremecedora victoria a finales de octubre contra el bloqueo en la ONU, hechos de trascendencia que convidan a seguir haciendo por Cuba, porque, como dice la canción en boca de aquellos niños, quien la defienda la quiere más.
(Tomado de Granma)
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Presidente cubano Díaz-Canel en México a asunción de López Obrador
El presidente de Cuba, Miguel Díaz-Canel Bermúdez, llegó hoy a México para asistir a la toma de posesión de Andrés Manuel López Obrador, quien asumirá mañana la primera magistratura del país en la Cámara de Diputados.
El mandatario cubano fue recibido en el hangar presidencial del aeropuerto capitalino Benito Juárez por representantes del gobierno entrante, y diplomáticos de la embajada de su país en México.Díaz-Canel es uno de los cerca de veinte jefes de Estado y Gobierno invitados especiales a la ceremonia, en la que han confirmado su presencia otras 400 personalidades de todos los continentes lo cual, según los anfitriones, es un récord histórico en México para eventos de este tipo.El presidente de Cuba llegó acompañado de una comitiva en la que figuran su esposa, Lis Cuesta Peraza, y el canciller, Bruno Rodríguez Parrilla, y de inmediato se dirigieron a la embajada para sostener un encuentro con diplomáticos y el resto del personal cubano acreditado en México.Ya se encuentran en esta ciudad el rey de España, Felipe VI; los presidentes de Honduras, Juan Orlando Hernández Alvarado; de Ecuador, Lenin Moreno, y de Perú, Martín Vizcarra Cornejo.También Danilo Medina Sánchez, de República Dominicana; Jimmy Morales, de Guatemala, y Brahim Ghali, de la República Árabe Saharauí Democrática, entre otros.La ceremonia de transmisión de mando, conocida aquí como toma de protesta, comenzará a las nueve de la mañana en el Palacio Legislativo de San Lázaro (Cámara de Diputados) con un primer tiempo protocolar en el que los jefes de las diversas bancadas pronunciarán cortos discursos limitados a 10 minutos en los que expondrán sus posiciones respecto del nuevo presidente y su programa político.Una vez concluida esa ronda, llegarán al recinto el presidente saliente, Enrique Peña Nieto, y el mandatario entrante, López Obrador, quien ocupará su lugar en el estrado a las 11 de la mañana, donde recibirá la banda presidencia de manos del titular de la Cámara, Porfirio Muñoz Ledo.
Precisamente para la ocasión, el pabellón nacional recobró el orden de sus colores, verde, blanco y rojo, que había sido cambiado hace ocho años.
Está previsto un discurso de López Obrador al recibir la banda, y al terminar se iniciarán los actos protocolares con los visitantes en el Palacio Nacional, donde brindará una recepción a los invitados especiales, hasta que en horas de la tarde se realizará en el popular Zócalo capitalino un acto de masas en el que volverá a hablar Amlo, como cariñosamente le dicen los mexicanos a su nuevo presidente. (Tomado de Prensa Latina)