La administración de Donald Trump adoptó unilateralmente la decisión de dar ese paso en septiembre del pasado año, a raíz de incidentes de salud reportados por funcionarios estadounidenses que laboraban en la capital cubana y de los cuales hasta ahora se desconocen las causas.
A ello se unió la suspensión de la entrega de visas para inmigrantes y no inmigrantes, la expulsión de esta capital de 17 diplomáticos cubanos, así como colocar en un nivel tres, de un máximo de cuatro, su advertencia de viajes a Cuba.
Desde el momento en que se adoptaron estas medidas, tanto el Gobierno de la isla como sectores norteamericanos, incluyendo legisladores, alertaron sobre los efectos negativos de esas medidas para las familias en uno y otro país y el riesgo de que Estados Unidos incumpliera sus compromisos de entrega de visas.
El memorando del Servicio de Investigaciones del Congreso, citado por medios como el portal The Hill y por la coalición Engage Cuba, se refirió al hecho de que la mayoría de los cubanos solicitantes de visa para viajar a este país deben recurrir a una embajada o consulado norteamericano en otra nación.
Como resultado, el texto indicó que a los cubanos les resulta más complejo visitar a sus familiares en Estados Unidos, mientras también se dificultan los viajes de personas del sector privado y algunos grupos culturales han tenido que cancelar sus presentaciones en territorio estadounidense.
Durante los primeros nueve meses del año fiscal 2018, que comenzó el 1 de octubre pasado, se concedieron menos de cuatro mil visas de inmigrantes a personas de la isla, cuando el acuerdo migratorio alcanzado en 1994 entre ambas naciones establece la entrega de 20 mil por parte de Washington.
Según Engage Cuba, el memorando también indicó que hay servicios limitados para atender a ciudadanos estadounidenses en Cuba y problemas para mantener 45 residencias diplomáticas, la mayoría de las cuales están ahora vacias.
El informe señaló que la situación del personal ‘reduce potencialmente la capacidad del Departamento de Estado de comprender la situación en el terreno y reportar sobre desarrollos’, entre otros temas,
Las noticias sobre este reporte se difunden luego de que este mes el Gobierno estadounidense redujo a un año el tiempo que sus diplomáticos pueden permanecer en Cuba, bajo el argumento de motivos de seguridad, pese a que muchos sectores de este país reconocen a la isla como un lugar muy seguro.