La coreógrafa británica Cathy Marston es bien conocida por el público de la danza cubana: hace algún tiempo montó una obra con Danza Contemporánea de Cuba y en aquel momento algunos pensaron que por su estilo neoclásico bien podría montar con el Ballet Nacional de Cuba.
Pues esa posibilidad se ha concretado: Marston está montando con el Ballet Nacional de Cuba una obra inspirada en una creación de William Shakespeare: La tempestad.
La fuerza dramática y la complejidad del argumento de la pieza del dramaturgo inglés se complementan con la contundencia de su personaje principal, Próspero; pero en su recreación, Marston hará un cambio fundamental, con el que rendirá homenaje a la prima ballerina assoluta Alicia Alonso. Próspero será aquí una mujer.
“Escoger esta creación de Shakespeare significa mucho para mí; cuando pensé en ella maduré muy bien las ideas para que sugiriera algo de esta nación, pues la trama se desarrolla en una isla; además, por ser muy extensa tuve que reducir el elenco, indicó la coreógrafa a la agencia Prensa Latina.
“Próspero simboliza a un mago hacedor de todo lo que existe en ese sitio rodeado de mar; como un islote colmado de música y baile; me concentré enseguida en Alicia, creadora de una magia alrededor del Ballet Nacional de Cuba y en torno a los bailarines”, destacó.
El estreno de la pieza será durante el próximo Festival Internacional de Ballet de La Habana, que se celebrará entre el 28 de octubre y el 6 de noviembre de este año.
Cathy Marston ha montado obras con importantes compañías internacionales, como el Royal Ballet, de Londres; el Ballet de San Francisco, de Estados Unidos; y Les Grands Ballets Canadiens, de Montreal.