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Por Iván A. Álvarez Abascal
La Orquesta Sinfónica de Stanford dirigida por la Maestra Anna Wittstruck, recientemente presentó en la Sala Avellaneda del Teatro Nacional de Cuba, el concierto La Música que baila, como parte de su gira por México y Cuba.
La agrupación de la Universidad de Stanford, integrada por cerca de 100 músicos de alto nivel, está integrada por estudiantes que están completando el bachillerato y el post-grado en diferentes disciplinas académicas y son elegidos rigurosamente. Ha colaborado con artistas de renombre internacional, como Jon Nakamatsu y miembros de St. Lawrence String Quartet.
La Maestra Anna Wittstruck ha estado al frente de diversas orquestas en los Estados Unidos, Europa y Asia, como la Orquesta Sinfónica de Harbin en China, la Orquesta Sinfónica de San Francisco, y de Syracuse, en Nueva York. En 2013 dirigió el primer concierto de música sinfónica en la Isla Catalina, donde presentó la composición musical de Aaron Copland, Appalachian Spring. Es Profesora Asistente del Departamento de Música de Stanford, donde completó su Doctorado en Musicología. Actualmente se desempeña como Directora Interina de la Orquesta Sinfónica de Stanford y de Stanford Philharmonia.
El programa del concierto La Música que baila incluyó las obras maestras Serenata para cuerdas, de Elgar; El pájaro de fuego, de Igor Stravinsky; y la Sinfonía No.7, de Ludwig van Beethoven. Además del estreno de Xenofobia en Memoria de la Democracia, del compositor Mark Applebaum.
El programa incluyó, además, el Guaguancó, del compositor cubano Guido López Gavilán, momento especial que contó con la participación de la compañía Lizt Alfonso Dance Cuba.
La Maestra Wittstruck captó el carácter de la versión de 1919 de la suite del ballet El pájaro de fuego, de Stravinsky, en la que se percibió la experiencia y madurez de la orquesta en el repertorio tradicional clásico europeo. Esa versión de la Suite núm. 2, está compuesta en tres partes: Danza infernal del rey Kashchei, Berceuse y Final. A partir de su dominio de la partitura y el entendimiento del discurso musical de los instrumentistas la Orquesta Sinfónica de Stanford logró una ejecución que por sí misma transportó al público a una fantasía de impresiones sonoras, con una conducción fresca, acertada y acorde a la esencia de la obra.
Conforme el programa fue avanzando, la OSS y la dirección de la Wittstruck, fueron mostrando sus atributos técnicos e interpretativos que alcanzaron su mayor lucidez en la gran obra de la noche, la Sinfonía No.7, de Beethoven. En su interpretación se manifestó el discurso musical de cada sección instrumental, al mismo tiempo que se percibió una unidad sonora que integraba todos los elementos musicales de la misma.
La gira de conciertos de la Orquesta Sinfónica de Stanford por Mexico y Cuba ha sido organizada por Classical Movements, una compañía con más de dos décadas de experiencia organizando eventos culturales.
