En septiembre del 2017 unos 200 nuevos estudiantes colombianos habitarán las aulas de las diferentes facultades de medicinas en Cuba con el compromiso de regresar a su país natal como médicos para la paz. Todos están marcados por la guerra, han sido parte con las armas en las manos, fueron víctimas o han crecido en el entorno de un conflicto interno que dura más de cinco décadas.
El gesto del Gobierno cubano de ofrecer esas becas —mil en cinco años— se inscribe en la larga lista de contribuciones de la isla al proceso de paz en la nación suramericana. Cada uno de ellos tendrá además el propósito de preparase para ayudar a sus comunidades en los nuevos tiempos.
La noticia fue anunciada esta semana a través de una carta de la misión diplomática cubana en Bogotá dirigida a la “Honorable Comisión de Seguimiento, Impulso y Verificación a la Implementación del Acuerdo Final (CSIVI)”. En ella se explica que las becas serían entregadas al Gobierno y a las Farc-Ep, 100 para cada parte durante un lustro, hasta completar los mil cupos.
José Luis Ponce, embajador de la isla en Colombia, también envió una carta a Iván Márquez, miembro del secretariado de las Farc-Ep, comunicándole personalmente la buena nueva.
Las respuestas en Colombia no se hicieron esperar, la propia CSVI FARC inauguró con esta noticia su cuenta conjunta en Twitter y agradeció “al Gobierno y al pueblo de Cuba (…). Con Martí decimos: «La mejor manera de decir es hacer”.
Mientras tanto, el Comandante Iván Márquez notificaba en esa misma red social “Al General de Ejército Raúl Castro nuestra gratitud por colmar a Colombia con su amor y solidaridad. Ayuda a la paz y nos ofrece médicos”. En otro trino añadió: “La contribución de Cuba al proceso de implementación del Acuerdo de La Habana y al postconficto en Colombia, es un gesto puro de humanidad”.
La exsenadora y defensora de los derechos humanos, Piedad Córdoba, completó el debate: “Pese a estar embargada Cuba no solo tiene una medicina que está entre las mejores del mundo, también es de la más solidarias”.
Unos siete mil guerrilleros de las Farc-Ep permanecen concentrados en 26 sitios veredales a la espera del proceso de entrega de armas y listos para capacitarse en aras de regresar a la vida civil. Estudiar marcará el futuro de muchos de ellos, así como de algunos de los jóvenes soldados que han cumplido en el Ejército colombiano, o de los que han sido desplazados de sus hogares por el conflicto.
La guerra interna en Colombia ha dejado unos 300 mil muertos, casi siete millones de desplazados y al menos 45 mil desaparecidos. Pero el proceso aún no ha concluido, pues tras cuatro años de intensas negociaciones con las Farc-Ep, recién han comenzado conversaciones con el Ejército de Liberación Nacional (ELN), el otro frente guerrillero que queda activo en esa nación.
Estudiar Medicina en Cuba
Un informe de la Unesco, Ciencia: hacia 2030′, reconocía que Cuba sigue siendo el país latinoamericano preferido por los jóvenes de la región para realizar estudios superiores.
Luis Alberto Pischs García, rector de la Universidad de Ciencias Médicas de la Habana, aseguró que actualmente miles de estudiantes extranjeros cursan estudios de pregrado en las diversas especialidades de las ciencias médicas. A ese proyecto se han vinculado 12 Facultades del país con el propósito de formar buenos profesionales, con sentido «humano y social de la medicina, con un mayor compromiso con su entorno», según explicó a la prensa.
«La formación médica en Cuba y el sistema de salud se basa en la atención primaria, donde tenemos un médico de familia responsable de una población de unas mil personas, donde hay una relación estrecha con la familia (…) Hay mucha experiencia en un trabajo de promoción de la salud y prevención y mucho contacto con la comunidad», dijo el representante de la Organización Panamericana de Salud (OPS) en Cuba, José Luis Di Fabio, a BBC Mundo.
La Escuela Latinoamericana de Medicina (Elam) es otra de los centros de educación superior donde estudian jóvenes extranjeros. Fue inaugurada el 15 de noviembre de 1999 para dar respuesta a la tragedia vivida por los pueblos de Centro América y el Caribe, afectados por dos terribles huracanes en 1998, que destruyó varias comunidades y ocasionó la pérdida de miles de vidas humanas. Desde entonces a la fecha se han titulado allí más de 25 mil médicos de 84 países.
Actualmente otros tres mil profesionales de diferentes nacionalidades realizan la residencia en Medicina General Integral y otras especialidades médicas en los hospitales de la isla.
Las mil becas ofrecidas por Cuba a los miembros de las Farc-Ep y a víctimas del conflicto colombiano son una confirmación de que la palabra empeñada por el Gobierno cubano durante los 4 años que hospedó a la Mesa de Diálogo, implica un compromiso visceral con la paz.