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Por muchos años laboraron vinculados al movimiento sindical desde diversas responsabilidades. El paso del tiempo no ha mermado en ellos la sabiduría y experiencia que atesoran, y aportan sin reservas a todo aquel que lo necesite.
Tal es el ímpetu que caracteriza a una amplia representación de jubilados y trabajadores que recibieron el agasajo de la Central de Trabajadores de Cuba (CTC) en ocasión del Día Internacional del Adulto Mayor.
Gisela Duarte Vázquez, miembro del Secretariado Nacional de la central sindical, en las palabras a los homenajeados, señaló que el mundo enfrenta un acelerado envejecimiento poblacional. En Cuba este fenómeno se confirma como la principal característica y reto de la dinámica demográfica que hoy alcanza el 19,3 % de sus habitantes.
“Dentro de unos años o quizás dos décadas, un 30 % de las cubanas y cubanos superaremos los 60 años y continuará de manera notable la reducción de la población económicamente activa”, afirmó.
Ante esta situación —subrayó— en la isla se impulsan programas dirigidos a estimular la fecundidad y crear condiciones idóneas para la atención a los ancianos por la familia y la sociedad.
La alta prioridad que la CTC concede a través de los Estatutos y Objetivos de Trabajo a la atención a los jubilados y pensionados como afiliados, por solicitud propia, a una sección sindical con todos los deberes y derechos establecidos, fue tema abordado por Xiomara Enríquez, funcionaria del Departamento de Asuntos Sociales y Laborales de la central sindical.
Expuso que a través del activismo sindical funcionan Grupos de Asesores, en cuyos antiguos puestos de trabajo, centros laborales o en los organismos de dirección se desempeñan como tutores, maestros de oficios, expertos y consultantes.
Comentó que continúan fortaleciéndose los nexos con las instituciones y organismos que atienden a los adultos mayores, como los ministerios de Salud Pública, Trabajo y Seguridad Social y Educación Superior, y la Asociación de Pedagogos de Cuba, entre otros.
Acerca del autor
Graduado de Licenciatura en Periodismo, en 1976, en la Universidad de La Habana. Hizo el servicio social en el periódico Victoria, del municipio especial isla de la Juventud, durante dos años.
Desde 1978 labora en el periódico Trabajadores como reportero y atiende, desde 1981 temas relacionados con la industria sideromecánica. Obtuvo premio en el concurso Primero de Mayo en 1999 y en la edición de 2009. Es coautor del libro Madera de Héroes.
