“Un amor entrañable lo unía a Cuba y su Revolución”, expresó Oscar Oramas, primer embajador de Cuba en Angola, al referirse al revolucionario angolano Paulo Teixeira en un acto efectuado este martes en la sede de la Organización de Solidaridad de los Pueblos de África, Asia y América Latina (Ospaaal).
El homenaje, organizado de conjunto con la embajada de la República de Angola en La Habana, contó con una amplia representación del cuerpo diplomático acreditado en Cuba. También estuvo Ramón Pez Ferro, quien fuera uno de los secretarios generales de la institución.
Luego de la colocación de una ofrenda floral ante el retrato del que además fuera un destacado dirigente del Movimiento Popular para la Liberación de Angola (MPLA), la secretaria general de la Ospaaal, Lourdes Cervantes Vázquez, expresó que Paulo fue un hombre extraordinario, que dejó su legado a todos los que tienen la responsabilidad de dar continuidad a la lucha por la independencia: “Nos acompañó durante toda su vida”, dijo.
Oramas expuso que Paulo Jorge se destacó por sus ideas de independencia y su profundo sentimiento nacional angoleño, una persona de gran sensibilidad humana y compromiso político: “Trató siempre de facilitar el trabajo de los cubanos”, narró.
Desplegó una activa labor de solidaridad en la Asociación de Amistad Cuba–Angola; y recordó que siempre que visitaba La Habana llegaba a la sede de la Ospaaal.
Paulo Teixeira nació el 15 de mayo de 1929, en Benguela. Antes de ingresar al MPLA, en el año 1956, realizó estudios de ingeniería química. Durante sus años de estudiante se destacó en la lucha anticolonial al lado de figuras como Agostinho Neto, Amílcar Cabral y Marcelino Dos Santos.
En enero de 1966 asistió a la Primera Conferencia Tricontinental de La Habana, por lo cual es fundador de la Ospaaal, donde desempeñó una activa labor en el Secretariado Ejecutivo Internacional en calidad de representante de la Conferencia de Organizaciones Nacionales de las Colonias Portuguesas, que agrupaba al MPLA, al Frente de Liberación de Mozambique, al Partido Africano para la Independencia de Guinea y Cabo Verde, y al Movimiento de Liberación de Sao Tomé y Príncipe. Defendió las causas justas de sus hermanos africanos.
Durante su vida revolucionaria fue miembro del Comité Central del MPLA–Partido del Trabajo; diputado a la Asamblea Nacional; gobernador de la provincia de Benguela, así como ministro de Relaciones Exteriores. En la esfera internacional continuó desempeñándose hasta su muerte, el 26 de junio del 2010.
En 1991 entregó la Orden de la Solidaridad El Mehdi Ben Barka al Comandante en Jefe Fidel Castro Ruz, la más alta que otorga la Ospaaal. Un año después, en 1992, fue portador de la medalla Antonio Agostinho Neto, el máximo lauro que concede el Estado de Angola, entregado en esa fecha al líder histórico de la Revolución Cubana.