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“Puerto Rico afronta una crisis fiscal debido a una deuda de 73 mil millones de dólares del fondo general, presupuesto operacional del Gobierno que no incluye utilidades públicas que la remontarían en alrededor de 160 mil millones”, señaló Wilma Reverón Collazo, copresidenta del Movimiento Independentista Nacional Hostosiano (MINH), durante una reciente conversación en La Habana.
Explicó que en Puerto Rico “rigen las leyes estadounidenses que impiden recibir recursos internacionales o establecer acuerdos con otros países. No tiene soberanía para hacerlo por ser colonia de los Estados Unidos”, condición que arrastra desde 1898.
El también copresidente del MINH, Néstor Nazario, puntualizó que la isla “aparte de la crisis fiscal, vive el colapso del modelo económico que Estados Unidos pretendió vender a América Latina. No se crean empleos ni hay inversión, es un país estancado (…). Estados Unidos montó un programa para facilitar las ganancias de sus empresas”.
La economía puertorriqueña en agosto de este año se declaró en suspensión de pagos. El gobernador, Alejandro Gracia Padilla, calificó la deuda de impagable. Por su parte, la población sufre un desempleo del 12 %, y casi dos tercios de los niños viven en la pobreza.
Entendidos denuncian que el sistema de salud está a punto de colapsar, debido a que la isla recibe menos presupuesto para la cobertura médica (Medicare) que los otros estados del país.
Ambos dirigentes del Movimiento Independentista alertaron que se está perdiendo población. “Este año han emigrado unos 83 mil ciudadanos (…). Los jóvenes profesionales se van ante la falta de empleos aprovechando la ventaja de poseer ciudadanía estadounidense”.
El tráfico de drogas se ha convertido en medio de vida y el país es puente de la que va hacia Estados Unidos. No es extraño que aumenten los índices de drogadicción, criminalidad, violencia doméstica, alcoholismo y suicidio. El jefe de la Policía borinqueña destacó en octubre que en lo que va de año han incautado más de 5,91 toneladas de estupefacientes.
Entre las medidas aplicadas a los boricuas está la relacionada con las leyes de cabotaje, las cuales obligan a que todo transporte de bienes desde y hacia el país norteamericano se realice a través de la marina mercante estadounidenses, lo que infla los costos en casi tres veces su valor. Más del 80 % de los productos que se consumen provienen de Estados Unidos.
Explican entendidos que por enmienda a una ley federal estadounidense, Puerto Rico no cuenta con el recurso legal de la bancarrota, Ley Federal de Quiebras, que obliga a los acreedores a aceptar una reestructuración de la deuda; lo que en el caso de la isla beneficia a los fondos buitres que no lo desean.
En este sentido expuso Nazario: “La situación que impone el colonialismo es dramática, los legisladores puertorriqueños aprobaron una ley de quiebras y un juez de la Corte Suprema de los Estados Unidos la declaró inconstitucional”.
Tampoco el Congreso en Washington tiene voluntad de ayudar; allí la colonia está representada por un delegado que tiene voz pero no voto. Como solución a la crítica situación se proponen medidas de austeridad, nuevos impuestos, recortes del gasto público y privatización de más bienes.
Los sindicatos se han activado ante las nuevas regulaciones anunciadas, y plantean su preocupación por el desmantelamiento de los derechos laborales.
Oficialmente llamado Estado Libre Asociado de Puerto Rico, el país está situado al este de la República Dominicana. Es la isla más pequeña de las Antillas Mayores con 3,5 millones de habitantes. Se le define como un territorio no incorporado de los Estados Unidos, con estatus de autogobierno bajo autoridad del Congreso. Cabe destacar que durante las elecciones presidenciales, los puertorriqueños no pueden votar si no poseen residencia oficial en alguno de los estados de la Unión.
es el mejor momento para que voten en contra y dejen de ser un Estado Asociado, al parecer es momento de decisiones para los boricuas, hasta ahora han votado en su mayoría por seguir bajo el protectorado yanqui, a los yanquis que Dios nos lo mantenga lejos, de amiguitos pero ellos en su casa y nosotros en la nuestra. Con mucho respeto pero nada de anexarnos.