La VIII Jornada Nacional contra la Homofobia y la Transfobia, cuyas actividades centrales se celebraron el fin de semana en Las Tunas, enfatizó en construir espacios laborales libres de exclusión por la orientación sexual de las personas.
En conferencia de prensa, la doctora en ciencias Mariela Castro Espín, directora del Centro Nacional de Educación Sexual (Cenesex), recordó que el nuevo Código de Trabajo dejó explícita la eliminación de este rezago, pero consideró que todavía se puede avanzar más en el campo legal al respecto.
La también diputada a la Asamblea Nacional del Poder Popular dijo que el Cenesex ha aumentado su colaboración con los sindicatos a través de seminarios de capacitación y la inserción de sectores e instituciones, con el fin de procurarles conocimientos y motivar a la población a mayor comprensión del tema.
Castro Espín enfatizó que ese propósito animó esta Jornada y adelantó que la campaña seguirá el año próximo con similar eje temático, que procura el reconocimiento pleno de este derecho humano refrendado por la Constitución de la República de Cuba.
Las Tunas acogió con ganas la VIII Jornada Cubana contra la Homofobia y la Transfobia
Hemos vividos jornadas intensas. Tengo tantas cosas de las que hablar que las palabras salen de mi mente y desembocan en mis manos sin límites, desesperadas, ávidas de ser vistas, leídas, escuchadas…
La VIII Jornada Cubana contra la Homofobia y la Transfobia tuvo sus actividades centrales educativas y culturales en Las Tunas, ciudad de puerta abiertas, que dejó entrar, hasta el fondo, a cuanto visitante, invitado o no, quiso ser testigo del calor humano que están acostumbrados a ofrecer tuneras y tuneros.
Como dijera la Directora del Centro Nacional de Educación Sexual, la Dra. Mariela Castro Espín: “una jornada por espacios laborales, dónde mejor que en Las Tunas, lugar que siempre ha luchado por los dominios de sus ciudadanos”.
Esta VIII Jomada Cubana vs. la Homofobia y la Transfobia celebrada en Las Tunas ha sido un verdadero suceso. En sus sedes de Puerto Padre y la cabecera provincial las actividades sucedieron con gran éxito.
El primer encuentro se realizó en la mañana del viernes 15, en el abarrotado centro-malecón del municipio Puerto Padre, donde habitantes de un pueblo, que una vez criticó (y aun lo hace), se vistió de colores para apoyar a la diversidad. Fue como un verdadero golpe a la ignorancia, a la exclusión y principalmente al odio. En este acontecimiento participamos además de la Directora del Cenesex, especialistas del Proyecto HSH-Cuba del Centro Nacional de Prevención, promotores de salud voluntarios, activistas de Redes Sociales y Coordinadores invitados de otras provincias.
Una vez entregado a Mariela el escudo de la ciudad y escuchado sus palabras de agradecimiento, disfrutamos de una feria por la diversidad, por la salud y los derechos sexuales, que sencillamente resultó ser algo magnífico.
De regreso a la cabecera provincial, en la tarde se desarrolló una conferencia magistral a cargo de Mariela Castro, en la Universidad Pepito Tey, acontecimiento que resultó sumamente provechoso, ya que se hizo un devenir del porqué de las discriminaciones y su surgimiento, así como un análisis de la situación en la que se encuentra la región latinoamericana y la necesidad de renovación del Código de Familia en Cuba, un cambio absolutamente necesario. El público que participó, estudiantes y profesores universitarios en su mayoría, pudo intercambiar sus criterios, algunos absolutamente absurdos, como el de alguien, (omito nombre y procedencia) que manifestó no estar de acuerdo con la adopción por personas LGBTI (proceso que contempla el nuevo Código de Familia), argumentando los problemas que le traería al infante identificar los roles de mamá y papá, y dejando entredicho que el niño o la niña podría devenir en homosexual.
Por suerte estaba en el sitio adecuado para que allí un mar de personas le explicaran que no existe diferencia alguna entre una familia heterosexual y otra homosexual, y que a los hijos lo que hay que brindarles es amor, que es la base de todo futuro, enseñarles que, aunque diferentes, todas y todos tenemos iguales derechos; como lo hace también una familia de lesbianas allí presente, que cría a sus hijos de una manera de la que muchos heterosexuales deberían aprender.
Ese viernes 15 también hubo Guateque campesino por la diversidad, lechón asado, inauguración de una exposición de arte, música, baile y mucha integración.
Las actividades del sábado 16 de mayo, día que antecede al señalado para combatir la Homofobia, empezaron temprano con el recorrido, a ritmo de conga, desde las cercanías de la Fuente de las Antillas por toda la Carretera Central, de tuneros y foráneos sumando a su paso a quienes andaban por el Centro Histórico de la ciudad, hasta el Parque Vicente García, donde la presidenta del Comité Organizador de la VIII Jornada, depositó una ofrenda floral al patriota tunero y agradecida por la oportunidad de rendirle tributo, dedicó palabras muy alentadoras a los presentes sobre cómo lograr espacios laborales más inclusivos, en concordancia con la Constitución cubana que contempla el acceso al trabajo como un derecho humano, y donde se escucharon exclamaciones de «¡¡¡Homofobia no, socialismo sí!!!».
Tarde de Feria en Las Tunas. Multitudes que van y vienen. Materiales educativos y promocionales, coloridos afiches, banderas multicolores y una alegría generalizada que no dejaban espacio al estigma ni a la discriminación.
En la noche, se desarrolló la Gala contra la homofobia y la transfobia “Me incluyo” en el teatro Tunas, ofreciendo a un talento local que demostró su arte en pro del respeto por la libre orientación sexual e identidad de género. El público se puso de pie ante el homenaje realizado a la Mama de Cuba, Coordinadora del Proyecto Trans en Granma y fundadora del Proyecto HSH-Cuba. Los más sonados aplausos para el grupo teatro tuyo “Narices”, que nos brindó fragmentos de una puesta en escena de Ernesto Parra digna de todos nuestros elogios. Lástima que se nos privó de disfrutar del tan aclamado y necesario de reconocimiento arte del transformismo, que sólo se vio representado por una artista de Camagüey, que además de no aparecer en el programa, solo nos brindó un solo número, dejando al respetable con deseos de ver más de un arte, que aunque algunos no lo reconozcan como tal, no pierde mérito alguno frente a cualquier otro, ya que necesita de mucha preparación y talento.
Quiero dejar claro que estas palabras no son mancha para la labor de todas y todos los participantes en dicho espectáculo. Cantantes, músicos, actores, modelos y bailarines, quienes entregaron lo mejor de sí, su amor, competencia y profesionalidad, todos dirigidos por el maestro Eddys Crespo.
La noche parecía no terminar nunca cuando el Cabaret “Taíno” abrió sus abarrotadas puertas a un público ansioso por disfrutar del Proyecto sociocultural “DIVINO de CUBA”, quien ofreció un atractivo programa conducido por Doña Margot “Dueña de la palabra” y un elenco que enalteció el arte del transformismo compuesto por Alegna, (de La Habana) Morena D´Castro, (de Las Tunas) y Zulema Anderson, (de Santa Clara) bailarines y modelos de la Compañía, todos bajo la dirección artística de Carlos Rey e Isaac Milián. Enhorabuena a los que hicieron esto posible.
Así despidió Las Tunas esta VIII Jornada Cubana contra la Homofobia y la Transfobia, escenario por la equidad que debe mantenerse y crecer hasta que en Cuba no se vean más las expresiones y muestras estigmatizadoras que nos dividen y nos hacen contrarios, máxime cuando vivimos en este país, donde todas y todos somos cubanas y cubanos, forjados en el albor de una Revolución eminentemente humana e inclusiva, que lucha por los derechos sociales, por lo que el odio y la discriminación a las personas LGBTI no debe ni puede existir.
Que no sea solo este 2015 el año que Las Tunas dedicó a la lucha contra toda forma de discriminación, cada mayo (o cualquier otro mes) debemos salir a las calles a sensibilizar a todos, porque así solo podemos vencer ese flagelo.
La sede del 2016: Matanzas, la tiene muy difícil, y de seguro estaré allí para vivir y contarles después, lo acontecido esa gran fiesta por la diversidad.