Una de las más connotadas agrupaciones cubanas de música mexicana, Mariachis Habana (MH), que dirige el destacado músico Miguel Barrera Sánchez, será la encargada del segmento artístico en el acto de premiación del XVI Concurso Nacional de Poesía Regino Pedroso que se efectuara este miércoles en el Palacio de los Trabajadores (CTC Nacional).
De acuerdo con una encuesta realizada por Trabajadores, entre unos 2 mil 500 lectores de varias provincias, la música de mariachis se encuentra entre las preferidas para una parte importante (60 por ciento) de los adultos, mientras que para los que viven en zonas rurales o en ciudades (capitales de municipios) con gran actividad agrícola y ganadera, alrededor del 87 por ciento escucha a diario los diferentes programas radiales dedicados a este género de cuerdas, trompetas y cantos, inscripto por la Unesco (2011), en la Lista Representativa del Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad.
Los jóvenes —entre 18 y 30 años—, sobre todo los que habitan en las grandes ciudades, demuestran menos interés (35 %) por esta expresión tradicional de México, tal vez surgida en la porción occidental del país azteca (Nayarit, Jalisco, Michoacán y Colima), aunque no se ha podido precisar con exactitud el lugar donde nació.
Vale destacar que la mayoría de las agrupaciones de mariachis de nuestra ínsula —sobre todo en la región oriental— están integradas por muchachos egresados de diferentes escuelas del sistema nacional de enseñanza artística, en las que se han graduado en instrumentos imprescindibles para la sonoridad que exigen los corridos, huapangos, sones jarochos y valses mexicanos, tales como guitarra, guitarrón, violín y trompetas, además de la flauta, el arpa y la vihuela, utilizados por algunos conjuntos y el acordeón, empleados por otros, como los MH.
Recientemente concluyeron sus estudios más de 100 adolescentes instrumentistas y cantantes en un curso especialmente concebido para preservar este tipo de conjuntos.
Muchos de los encuestados afirmaron que algunos de los programas tradicionales de la radio dedicados a este género han sido eliminados del éter, en tanto alabaron cierta apertura en la programación televisual y lamentaron que no se extendieran los que con tal fin se exhibieron en el verano del pasado año. Igualmente abogaron por mayores encuentros, festivales y presentaciones periódicas de los mariachis en diferentes salas, plazas y teatros.
La mayoría de los músicos de MH, fundado en el año 2002, son graduados en disimiles instrumentos musicales, entre ellos su director, que lo es en violín. Esta agrupación, como otras que se desprendieron de la reconocida Mariachis Cuba, de Santiago de Cuba, se creó —según Miguel— a solicitud de la dirección de Cultura en la entonces denominada provincia de Ciudad de La Habana, con el fin de satisfacer la demanda de este tipo de música en los municipios capitalinos, así como consolidar una nómina de profesionales, a fin de enfrentar a los “intrusos” que actúan en múltiples escenarios, sobre todo en el sector turístico.
“Desde su fundación MH ha gozado de gran popularidad en todo el país. Hemos sido aclamados en los distintos festivales de música mexicana, entre ellos los de La Habana, Guanajay y Bayamo —este último en ocasión del Grito de Dolores—, de gran lucimiento: En los dos últimos, durante la inauguración, los participantes han realizado desfiles. Es un hermoso espectáculo al que concurren la mayoría de los habitantes”, precisó Barrero Martínez.
La música y vestimenta de los mariachis son famosas en todo el mundo como símbolo de la cultura mexicana. MH, amén de la incuestionable calidad artística de sus interpretaciones, sostiene un impecable diseño en sus típicos atuendos, así como se caracteriza por una férrea disciplina escénica. “Es por eso que somos reclamados en muchos espectáculos, festivales y otros eventos. Igualmente hemos recibido solicitudes de actuación en escenarios de varios países como Colombia, Venezuela, Francia, España, Estados Unidos y el propio México”, dijo Miguel.
Sin embargo, en casi todos los conciertos de MH, el público solicita discos con sus grabaciones, ante lo cual el director de esta agrupación, perteneciente a la Empresa Antonio María Roméu, enfatizó: “No entendemos por qué, si tenemos tanta calidad artística, gustamos a niños, jóvenes y adultos, y poseemos la máxima calificación (Excelente) del Instituto Cubano de la Música, aún no hemos podido hacer un disco. Ojalá que las disqueras reparen un poco más en la música mexicana que se hace en Cuba y nos incluyan en sus planes de producción”.
La música interpretada por MH, igualmente difundida en varios espacios de la televisión cubana, forma parte de un variado repertorio en el que mayoritariamente se incluyen temas clásicos, aunque también interpretan otros géneros como boleros y valses. Por ello, uno de los premios más emocionantes que recibirán los laureados del concurso de poesía Regino Pedroso será el regalo musical de Mariachis Habana, una compañía que desde su entrada al escenario impacta por su sonoridad y por sus vestimentas de charros, adornadas con calados de gamuza y botonaduras doradas.
[note note_color=»#dfd7de» radius=»2″]Según algunos historiadores, el origen de la palabra «mariachi» proviene de tiempos de la Invasión Francesa (1862), época en la que durante una boda de rancheros en un poblado de Jalisco llegaron unos soldados franceses, y sorprendidos por el jolgorio protagonizado por aquellos músicos, preguntaron: “C’est un mariage?” que en francés significa «¿es una boda?» y así fue como los franceses denominaron a estos conjuntos como «marriach» y tras el uso derivó en «mariachi». Para otros, este vocablo deriva de un canto aborigen a la Virgen María, en el que se mezclan el náhuatl, el español y el latín. Este canto empezaba diciendo “Maria ce son” que quiere decir “te amo, María”. “Maria ce son”, igualmente derivó en “mariachis”. Otro reconocido historiador e investigador del origen de estas agrupaciones, afirma que los sones de mariachi, así como ese vocablo provienen de los indígenas «cocas» de Cocula.[/note]