De unos, he visto sus “ojeras poscierre económico”, pruebas irrebatibles de un “déficit” de sosiego y un “superávit” de trabajo. De otros, he conocido sus dotes de estrategas para “conquistar” utilidades. Con algunos he pactado ventajosos “contratos”: me han dado sus análisis y yo, en cambio, he emborronado páginas. De todos admiro sus habilidades para… Continuar leyendo