Las montañas del municipio de El Salvador, específicamente el polo productivo de Chapala, prestaron su verdor y buen clima de escenario para el acto nacional por el aniversario 86 de la Central de Trabajadores de Cuba (CTC), la segunda organización de masas más antigua del país.

Guantánamo, que merece un aplauso de confianza y reconocimiento al decir de Isdalis Rodríguez Rodríguez, segunda secretaria de la organización, fundada por Lázaro Peña el 28 de enero de 1939, se empinó a la sede por los buenos resultados en el proceso orgánico del 22 Congreso de la CTC, el apoyo para impulsar los programas de desarrollo del territorio y el esfuerzo recuperativo tras el paso del huracán Oscar.
Resultaron reconocidos los miembros del Secretariado de la CTC en Guantánamo, también los médicos, linieros, telecomunicadores, constructores…, pues la fuerza de la naturaleza fue devastadora en algunos municipios, pero la solidaridad se levantó con superiores vientos…, y “devolvió la vida y la luz, las carreteras y los techos, así como la sonrisa más auténtica tras la tempestad”, manifestó Isdalis.
La emulación fraternal, que convocó lides interprovinciales en otros puntos, como el liderazgo, completamiento de cuadros y funcionamiento orgánico reconoció como destacadas a Pinar del Río, Matanzas, Sancti Spíritus, Santiago de Cuba y Holguín, cuyos representantes recibieron su merecida distinción a ritmo del auténtico repentismo cubano.
Durante el acto, presidido también por Yoel Pérez García, primer secretario del Partido en el territorio más oriental, la dirigente sindical ratificó que la CTC seguirá identificada con las prioridades del Partido, de trabajar para crecer en prosperidad personal, familiar y colectiva.
Rodríguez Rodríguez denunció, además, el regreso de Cuba a la lista de países patrocinadores del terrorismo, en las primeras horas del nuevo mandato presidencial de Donald Trump en Estados Unidos. Expresó que siempre hemos sido y seremos solidarios, nunca terroristas, y que la clase obrera es la más golpeada por esas expresiones de prepotencia, pero, al mismo tiempo, un sector social orgulloso de su resistencia.
“Ni una ni mil listas, enfatizó, podrán borrar el abrazo solidario y de paz por el que nos reconocen la mayoría de los pueblos y gobiernos del mundo, y de ello hablan los resultados en las Naciones Unidas cada año en las votaciones contra el bloqueo y el ejemplo de nuestras misiones médicas, educativas, deportivas…”.
En la actividad también fueron galardonados colectivos y trabajadores locales; al tiempo que organismos e instituciones estimularon a la organización sindical guantanamera por los logros que la hicieron merecedora de la fiesta por la efeméride.