Palco #12: Tormenta turca

Willy Sagnol abrió el paraguas dentro de casa y le llovieron golazos turcos… Goles estruendosos, con truenos, rayos y relámpagos. Los georgianos no entendían su mala suerte en lo que parecía un día soleado.

Salieron a pasear de la mano de Kvaratskhelia, que creaba cierto desparpajo en el área de los turcos, pero estos rápidamente se hicieron con el dominio, certificado al minuto 25 con una pintura de volea que firmó Müldür desde el borde del área.

La tropa de Sagnol intentó protegerse del aguacero… Avanzar ordenados, procurando no mojarse. Apenas escampó un poco, Mikautadze empujó un balón que igualó el marcador con colaboración del arquero Günok.

Sagnol no creía en supersticiones, ni en viejas estrategias. Por eso, como podía, iba a buscar el partido, aunque recibía latigazos y el cielo amenazaba con más lluvia, para eso tenía Mamardashvili; para sacarlos del apuro cuando hiciera falta.

Pero claro, por mucho que te resguardes, si la tormenta es fuerte, te empapas. Y Arda Güler volvió a romper pronósticos, y records, y mandó un zurdazo lejano con ráfagas de viento nivel huracán. Ni Mamardashvili se acercó a evitarlo. Por toda la escuadra, un zapatazo que en otra época podría haber salido de pie izquierdo de Marco Asensio.

No quedaba de otra para los georgianos que intentarlo bajo agua, con el peligro latente de que cayera el tercero y definitivo. Y allá fueron Kvaratskhelia, Kochorashvili, Mikautadze y compañía a buscar el empate… y vaya que estuvieron cerca, pero la tempestad los hizo estrellarse con los palos, mientras Mamardashvili les regalaba vidas extra.

En el descuento volvieron a rozar el empate y en un córner Sagnol autorizó la subida del arquero, dejando la casa desprotegida… Y les pasó lo peor: Günok despejó de puños asistiendo de manera poco ortodoxa a Aktürkoğlu, que cruzó el campo en solitario hasta divisar portería, mientras varios georgianos corrían desesperados debajo de la lluvia solo para ver como el agua volvía a entrar en su casa.

*En esta jornada, Portugal derrotó a República Checa 2-1, con anotación de Francisco Conceição en el tiempo añadido.