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Al Padre de la Patria, Carlos Manuel de Céspedes, rendirá homenaje el pueblo de Bayamo el próximo 18 de abril cuando se cumplan 204 años su natalicio, suceso ocurrido en esta propia localidad.
De manera especial el Museo Casa Natal de este prócer tiene diseñado un modesto programa de actividades que incluye un evento científico, exposiciones, coloquios, juegos deportivos, encuentros con historiadores, entre otros.
Al respecto Javier Vega Leyva, director de la renombrada institución, dijo que, como cada año para esta fecha, tendrá lugar la Jornada Creador de la Patria, en su edición XXXI, que iniciará este sábado 15 con un concierto de lujo por parte de la Orquesta Sinfónica de Cámara San Salvador de Bayamo.
Mencionó entre las actividades más importantes la inauguración de la exposición de artes plásticas Por las sendas del Padre, que protagonizan los niños de los talleres de esta especialidad de la Casa de Cultura 20 de Octubre, la presentación del boletín El avisador cespediano, la conferencia Hombre que trasciende y una cena en la propia sede.
Destacó también la tradicional ceremonia de las banderas en la Plaza de la Revolución, de esta Ciudad del Himno, la primera de Cuba y bautizada así por Céspedes en los días en que fue liberada la otrora villa por manos del incipiente ejército formado por este patricio, en 1869, además de la iluminación del cuadro con su imagen que rige el principal salón del museo.
Por esos días de homenajes el proyecto de trabajo Espiral relanzará el concurso Bayamo, historia y orgullo, el cual auspicia junto al Gobierno local y la dirección municipal de Educación.
Carlos Manuel de Céspedes fue un abogado dado a la cultura artística e integral, la práctica de deportes, sobre todo la esgrima, reconocido en toda la región oriental por su acaudalada riqueza y fue, sin embargo, el iniciador de las guerras de independencia en Cuba, hecho ocurrido el 10 de octubre de 1868.
Se le conoce como al Padre de la Patria porque prefirió entregar a uno de sus hijos, Oscar, para que fuera fusilado, antes de deponer las armas con las que pretendían alcanzar la emancipación del colonialismo español.
