Por Enrique Moreno Gimeranez
«Rechazamos enérgicamente nueva espuria resolución del Parlamento Europeo. Cuba no le concede autoridad moral alguna para pronunciarse, juzgar y mentir sobre asuntos internos que solo competen a nuestro país», expresó Yolanda Ferrer Gómez, presidenta de la Comisión de Relaciones Internacionales de la Asamblea Nacional del Poder Popular, a propósito de la maniobra contra nuestro país, protagonizada en la Eurocámara este 16 de septiembre y promovida por un grupo reducido de eurodiputados que responden a la agenda de Washington.
Como había denunciado previamente esta Comisión del Parlamento cubano, en una Declaración, este jueves se logró imponer un nuevo debate sobre Cuba, lo cual convierte nuevamente a esa entidad legislativa europea en triste rehén de una escalada agresiva ajena a intereses genuinamente europeos y contraria al espíritu de diálogo respetuoso que ha primado en las relaciones entre nuestra nación y la Unión Europea.
Frente a este ejercicio politizado, que responde más a las agendas personales de sus promotores que a una legítima preocupación por la protección de los derechos humanos en nuestra Patria y en el mundo, se levantaron voces en defensa de la realidad cubana y en solidaridad con nuestro país.
«Los derechos humanos del pueblo cubano están siendo violados de forma constante desde que hace más de 60 años Estados Unidos impuso un bloqueo criminal que limita y casi elimina el acceso a sus bienes básicos», manifestó en el debate el eurodiputado español Manu Pineda.
Subrayó que «a estas alturas no aspiro que ustedes respeten la soberanía de este ejemplo de dignidad que es el pueblo cubano. Me conformaría con que dejasen de hundir en la ignominia a este Parlamento. Por último, decirle al pueblo cubano que no está solo, que estamos con ustedes, que le mandamos nuestro cariño y nuestra solidaridad, y que estaremos con vosotros ¡Hasta la Victoria Siempre!».
Por su parte, la europarlamentaria Sira Rego precisó que la resolución adoptada hoy contra Cuba «busca la confrontación, persigue el injerencismo puro y duro, plantea o cuestiona el Acuerdo de Cooperación con Cuba, y pretende volver de nuevo a las posiciones más reaccionarias lideradas por Aznar en su momento».
Trasladó su solidaridad hacia nuestro pueblo y declaró que «somos muchos otros los eurodiputados de esta institución que los apoyamos, que creemos en la solidaridad entre los pueblos, y que hay que trazar las relaciones internacionales desde el respeto, el reconocimiento a la soberanía de los pueblos, la cooperación y el entendimiento».
A su vez, el diputado al Parlamento Europeo João Pimenta Lopes destacó que una vez más se intentó hoy utilizar a este órgano legislativo en la campaña contra Cuba, en línea con la política estadounidense de injerencia y agresión, incrementada con Trump y ahora mantenida por Biden.
«Utilizando de forma hipócrita los derechos humanos, omiten el bloqueo económico, comercial y financiero –criminal, ilegal y con carácter extraterritorial– impuesto por Estados Unidos desde hace más de 60 años. Un bloqueo que irrespeta y viola brutalmente los derechos del pueblo cubano y los principios de la Carta de Naciones Unidas», denunció.
Reafirmó su solidaridad con Cuba y nuestro pueblo, valoró su valentía, dignidad y resistencia, y exigió el fin del bloqueo, la injerencia y la agresión contra nuestra nación.
Gringolandia, como titiritera, empuja las cuerdas y sus asalariados bufones, peleles y payasos hacen el hazmerreír y su bajo nivel intelectual no les permite ver lo grotesco y ridículo de sus pantomimas, piruetas, acrobacias y maromas para congraciarse con su amo y señor.
Que se preocupen de resolver los problemas de sus paises, que no son pocos, y nos dejan a nosotros tranquilos. He estado por allá y sé lo que les digo.
Sería bueno que promoverán una Resolución de disculpa por las atrocidades de la colonización y los millones de nativos y esclavos asesinados para alcanzar el bienestar que hoy imaginan que disfrutan. Peleles de los yanquis que son. Sacúdanse de ellos, como hicimos nosotros.