Llegaron vestidos de gloria, con el orgullo del deber cumplido y la certeza de haber salvado vidas en esta hora crucial en que el mundo se espanta ante el contagioso virus que ha provocado inmensidad de muertes.
Se les recibió en cada uno de sus municipios, donde los esperaban las autoridades del territorio, sus familias y la comunidad. Les dieron la bienvenida banderas cubanas, canciones patrióticas y aquellas que hablan de amor y paz; tambien flores como símbolo de agradecimiento infinito. Se les esperaba con la alegría de la vida, luego de haberse salvado y haber salvado al prójimo.
Las enfermeras Dunia Fernández y Yudi Gámez fueron recibidas en Santa Clara por las autoridades de la provincia, en particular por Gretza Sánchez y Moraima Claro, directora provincial de Salud y secretaria general del sindicato en la provincia, respectivamente.
A su vez, Miguel Colina, miembro del Buró Provincial del Partido, al darles la bienvenida reconoció la labor de estas mujeres, significó el valor que entraña que dos villaclareñas seguidoras de la estirpe del Che hayan estado en uno de los lugares más difíciles de la pandemia.
Añadió que tenerlas sanas y vitales para continuar en la batalla cotidiana es muy importante y reafirmó la entrega realizada al haber dado un extra por mantener vivos a todos los pacientes de Covid-19 que atendieron. Además, refiriéndose a la totalidad de ese personal, reconoció la valía de dichos profesionales formados por la Revolución, quienes son ejemplos de la ética médica cubana: humanista y solidaria.
Las enfermeras, con la dulzura de una profesión que está siempre entre la pena y el dolor de los demás, ratificaron el compromiso de mantener en alto su profesión; aseguraron estar dispuestas a emprender tareas similares en cualquier latitud.
También regresaron con el deber cumplido el licenciado en enfermería y especialista en intensiva Arístides Ramírez Hernández, de Cifuentes, y de Antigua y Barbuda llegó el médico, especialista en pediatría, David Antonio Ferrer Bravo, a quienes de igual manera en sus municipios respectivos el pueblo y las autoridades de esos territorios les dieron cordial, respetuosa y emotivo recibimiento.
Regocijo y alegria permanente, solidaridad no nos sobra, la compartimos.
Feliz regreso a nusetra patria.
Felicidades al ejército de batas blancas que ha luchado por salvar vidas