Políticos y mandatarios de los países miembros de la Unión Europea (UE) se preparan para posibles alianzas en la lucha por altos cargos en el Parlamento Europeo.
Tras unas elecciones que evidenciaron el fin del bipartidismo y un auge de los euroescépticos, los principales líderes políticos comenzaron la puja a través de contactos y cabildeos para posibles alianzas.
Los partidos centristas tradicionales sufrieron una paliza y la llamada Gran Coalición ―el bloque de la Alianza Progresista de Socialistas y Demócratas (S&D) de centro-izquierda y el Partido Europeo del Pueblo (PPE) de centro-derecha― perdió más de 70 escaños y mayoría en el Parlamento de la UE.
El Partido del Brexit, dirigido por Nigel Farage, se llevó a casa el 31,71 % de los votos, lo que equivale a la proporción de votos del Partido Laborista y los Demócratas Liberales combinados, reflejo de la insatisfacción con el quehacer de los partidos tradicionales del Reino Unido.
El Partido Socialista Obrero Español (Psoe) registró otro buen desempeño luego de una victoria en las elecciones generales a fines de abril, ganando el 32,84 % de los votos.
La líder de extrema derecha en Francia, Marine Le Pen ganó con el 23,31 % de los votos y superó a la alianza La République En Marche del presidente Emmanuel Macron, que obtuvo 22,41 por ciento.
El partido de derecha Liga Norte, dirigido por el viceprimer ministro Matteo Salvini, se llevó la victoria con el 33,64 %. El primer ministro nacionalista de extrema derecha de Hungría, Viktor Orban, obtuvo una gran victoria con el 52,14 por ciento.
La alianza del Partido Verde tuvo su mejor desempeño al ganar 70 escaños y obtuvo el 9,32 % de los votos.
El líder del Psoe, Pedro Sánchez, aspira a cargos de importancia en las instituciones de la UE, y con ello ganar protagonismo regional.
El político español se convierte así en el dirigente socialdemócrata de mayor peso en la Unión Europea.
En opinión de los analistas, los grandes vencedores de la cita fueron la Alianza de los Demócratas y Liberales, con 109 puestos (40 más que en el 2014), y Los Verdes con 69 (17 más).
Dichos grupos se convierten así en fundamentales para la formación de coaliciones, y su ascenso demuestra el descontento de los ciudadanos con la política tradicional, su preocupación por el cambio climático y la inactividad de sus gobiernos.
Las fuerzas de ultraderecha triunfaron en Hungría, Polonia, Reino Unido, Italia y Francia. El 2 de julio, en Estrasburgo, Francia, tendrá lugar el primer pleno del nuevo Parlamento y sus miembros deberán elegir a un presidente y 14 vicepresidentes.
El resultado de los comicios presenta a un Parlamento fragmentado, marcado por el fin del bipartidismo, el ascenso de los Liberales y Los Verdes, así como el crecimiento, limitado, de fuerzas euroescépticas.