Cada 21 de marzo, el mundo celebra el Día Mundial de la Poesía, una fecha establecida por la UNESCO en 1999 para honrar el poder de la palabra poética como expresión artística y cultural, así como por su estudio y escritura, por intentar darle su merecido lugar en el mundo y preservar las tradiciones parte del patrimonio cultural inmaterial de la humanidad.
La poesía, con su capacidad para conmover, inspirar y trascender fronteras, es un reflejo de la belleza y la complejidad del ser humano. Este día nos invita a reconocer su valor como herramienta de diálogo, reflexión y transformación social.

En Hispanoamérica, la poesía ha sido un faro luminoso que ha iluminado las letras universales. Grandes poetas y poetisas han dejado una huella imborrable en la historia literaria, regalándonos versos que hablan de amor, identidad, resistencia y esperanza.
La poesía desempeña un papel importante en la cultura y la sociedad, fomenta la diversidad lingüística, el diálogo intercultural, y ayuda a explorar el lado artístico de cada individuo. Popularmente se dice que posee un “lenguaje universal”, y es cierto.
En la actualidad ha demostrado ser un género resiliente, capaz de redefinirse en un mundo interconectado y dominado por las tecnologías digitales. Evoluciona constantemente para responder a las demandas de las nuevas audiencias sin perder su esencia como una forma poderosa de expresión artística.
El Día Mundial de la Poesía es una oportunidad para celebrar las voces de poetas reconocidos y muchas otras que han enriquecido nuestra cultura. Es un recordatorio de que la poesía no es solo un arte, sino también un puente que nos conecta con nuestras emociones, nuestra historia y nuestra humanidad compartida. Que este día nos inspire a leer, escribir y compartir versos que nos acerquen unos a otros. (Con información de Arte por excelencias)