El Ballet Nacional de Cuba (BNC), bajo la dirección de la primera bailarina Viengsay Valdés, se prepara para una nueva temporada de presentaciones en La Habana, con un programa que combina clásicos del repertorio universal y piezas contemporáneas.

La sala Avellaneda del Teatro Nacional acogerá las funciones los días 1 y 2 de marzo.
Se presentarán obras de reconocidos coreógrafos: Pontus Lidberg, Eric Gauthier y Johan Kobborg.
Entre las piezas que subirán a escena destacan El peso del instante, de Lidberg, con música del pianista y compositor cubano Aldo López Gavilán; Ballet 101, de Gauthier; el pas de deux de Lucile, de Kobborg; y el Grand pas de Paquita, creación del célebre coreógrafo francés Marius Petipa.
Esta última es una de las joyas del ballet clásico y pondrá de relieve la destreza técnica y artística de los bailarines de la compañía.
El BNC informó en su página oficial de Facebook que la función del 2 de marzo estará dedicada a la memoria de la heroína Vilma Espín, en conmemoración del aniversario 95 de su natalicio, que se celebra el próximo 7 de abril.
Esta gala especial rendirá homenaje a una de las figuras más emblemáticas de la historia cubana, destacada por su legado en la lucha por la igualdad de género y los derechos de la mujer.
Posteriormente, del 7 al 9 de marzo, la compañía regresará al escenario con un variado programa que incluirá Después del diluvio, de Alberto Méndez, y el Grand pas de Paquita.
Además, se presentarán varios pas de deux icónicos del repertorio clásico, como El corsario, El talismán, El mercader y la esclava, Diana y Acteón y Esmeralda.
También se interpretará End of time, del coreógrafo británico Ben Stevenson, una obra que resalta la expresividad y sensibilidad de los bailarines.
Con esta temporada, el Ballet Nacional de Cuba reafirmará su compromiso con la socialización de la danza escénica en Cuba, combinando tradición y modernidad.