Arnaldo, el Hombre Congreso

Arnaldo Díaz Hiedra lleva bien ganado el calificativo del Hom­bre Congreso. Desde el XIII con la presencia de Lázaro Peña, hasta la fecha, ha participado en seis de las magnas citas de la CTC, y volverá a hacerlo en las sesiones finales de abril del 2025.

En el secretario general del buró sindical del hotel Sol Pal­meras, en Varadero, sigue aloja­do el mismo ímpetu de una exis­tencia consagrada al sindicato, de la cual 32 años han transcu­rrido en esa instalación turísti­ca, fruto de la primera empresa mixta surgida en el país.

En su conducta habita el prestigio del movimiento sin­dical por el que tanto lucha, le reconoció Ulises Guilarte De Nacimiento. Quizás por esareputación no se le podía negar la palabra, cuando parecían agotadas las intervenciones en la Conferencia Provincial de Matanzas.

“Tengo el orgullo de perte­necer a un colectivo, que como dijera el Primer Ministro Ma­nuel Marrero, nació derecho y se mantiene igual. Sol Palme­ras conserva ese espíritu que nos sembrara el Comandante en Jefe Fidel Castro el 10 de mayo de 1990 cuando nos pidió en el acto inaugural ser ejemplo para el progreso del turismo cubano.

“Eso lo honramos todos los días. Este año, superaremos el plan de ingresos y de las utili­dades, y ya tenemos vendidas todas las habitaciones disponi­bles, algo posible porque conta­mos con trabajadores extraor­dinarios, que hacen que repita la experiencia de alojamiento el42 % de clientes y tengamos, se­gún las encuestas, más de 92 % de satisfacción.

“Gracias a estos resultados, los trabajadores tienen una me­dia de 28 mil pesos y eso tam­bién ha venido resolviendo pro­blemas que teníamos en el día a día de las operaciones. Eso se lo­gra porque el sindicato trabaja, moviliza, es ejemplo”, significó.

Arnaldo aseguró que la pérdida de confianza del movi­miento sindical señalada en la Conferencia, solo se recuperará en la base, en la atención a las quejas, con respuestas claras. “El dirigente sindical no puede andar con mentiras, ni esquivar las cosas. Tiene que estar siem­pre en primera línea.

“En Sol Palmeras ningún trabajador le pregunta a la di­rección del hotel por los proble­mas del transporte obrero, vie­nen a ver al sindicato, porque el prestigio del sindicato es la verdad”.