En estos tiempos, como nunca antes, el movimiento sindical tiene que elevar su liderazgo en la conducción de la clase obrera que con heroísmo vence pruebas difíciles y mantiene su protagonismo en la construcción de la sociedad socialista próspera y sostenible a la que aspira la inmensa mayoría del pueblo cubano.
Ese fue el principio que defendieron los delegados a la Conferencia 22 Congreso de la CTC del municipio de Las Tunas, en la provincia homónima del oriente cubano, y lo validaron con certeras intervenciones que convocan, principalmente, a prestar mayor atención a los procesos de afiliación de los trabajadores en los sectores estatales y privados.
No es casual que la organización, siguiendo el legado de Lázaro Peña González, tenga identificada esa misión como la tarea política más importante; sin embargo, es una amenaza real a la unidad la tendencia a la desafiliación, tangible no solo en esta demarcación, porque el mal pica y se extiende.
En este territorio, “(…) al establecer una comparación con el año 2019 –el balance es de los últimos cinco años- se refleja un decrecimiento (…) en mil 178 afiliados (…)”, declara el informe central presentado al auditorio.
En el documento citado enumeran como causa predominante la falta de efectividad de la vinculación con la base, mediada ahora por carencias materiales y hasta de cuadros que imponen esfuerzos superiores para estar a la altura de las hazañas cotidianas de los trabajadores, cuyo desempeño está signado, también, por limitaciones de recursos, salarios bajos en tiempos de inflación…, panorama que enfrentan con voluntad de vencedores.
Además reconoce que en las fuentes principales: estatales, privados y jubilados hay reservas para crecer, pues “(…) en los ocupados en la economía existen cuatro mil 404 trabajadores sin afiliar, en los no estatales la cifra asciende a tres mil 165, y en los jubilados solo se afilia el 87 por ciento (…)”.
Una mirada al universo de los nuevos actores económicos denota que están afiliados tres mil 975, de un potencial –porque no tienen otro vínculo laboral- que enmarca a nueve mil 288, una cantera a la que deben brindar una atención especial, porque el sindicato tiene que velar y defender, también, los derechos constitucionalmente reconocidos de los integrados a este segmento en ascenso.
De las ventajas que tiene estar afiliados dieron cuentas Ana Rosa Pérez Rodríguez y Óscar Fidel Rosales Carreño, secretaria general del Buró de los arrendadores de habitaciones en divisa y paladares, del Sindicato de Hotelería y Turismo, y miembro de ese órgano de dirección, respectivamente, quienes abundaron sobre gestiones realizadas y soluciones obtenidas que benefician la gestión colectiva.
Revertir la situación depende de cuadros sindicales con eficiencia en su gestión y liderazgo para cumplir la misión de organizar, representar, movilizar y defender los derechos elementales de los trabajadores.
Los asistentes reflexionaron sobre este y otros temas que son expresión del conocimiento de las debilidades, amenazas, fortalezas y oportunidades, que marcan el quehacer del movimiento sindical, y son referentes para transformar la situación y continuar cimentando la unidad como el arma fundamental en el enfrentamiento a las urgencias que nos desafían.
Los delegados eligieron al nuevo Comité Municipal y sus miembros ratificaron a Deyilien Borrego Figueredo en el cargo de secretaria general; y, seleccionaron a sus representantes en la conferencia provincial 22 Congreso de la CTC.
La conferencia estuvo presidida por Otoniel Peña López, funcionario del Comité Provincial del Partido; Roberto Carlos López, primer secretario del Comité Municipal del Partido; y, Odalis Batista Pérez, secretaria general de la CTC en Las Tunas, cuyas intervenciones sazonaron las proyecciones de trabajo para la nueva etapa.