La forma elegida por los protestantes es el cierre de muchas de las más importantes vías de la nación que, tras cuatro días de bloqueos ininterrumpidos, ya genera graves afectaciones al sector productivo y serias molestias a la ciudadanía.
La Alianza de Asociaciones y Gremios (Aliadas) alertó que, de acuerdo con sus estimaciones, las pérdidas diarias podrían alcanzar los 80 mil millones de pesos (unos 20 millones de dólares al cambio actual), dañando de manera significativa la estabilidad económica del país y el costo de vida de los colombianos.
Según acotó la organización, el paro decretado tras el alza del precio del diésel impacta sobre sectores clave como la agricultura, el comercio y la manufactura, al tiempo que advirtió sobre cómo el desabastecimiento y el incremento de los costos de transporte podrían traducirse en una mayor inflación.
Para paliar la situación, el Ministerio de Agricultura y Desarrollo Rural implementó un plan de acción urgente para garantizar el paso prioritario de vehículos que trasladen alimentos y productos esenciales.
La cartera agropecuaria solicitó a las autoridades y líderes del paro que se habiliten corredores de abastecimiento para evitar pérdidas económicas y asegurar el suministro de comestibles.
En este sentido, el Ministerio instaló un Puesto de Mando Unificado del sector que trabaja en coordinación permanente con el Ministerio de Transporte para monitorear la situación de abastecimiento alimentario a nivel nacional.
Durante la víspera, el presidente de la nación, Gustavo Petro, afirmó que en realidad se trata de un paro empresarial que responde a intereses económicos y políticos, y no a los de un movimiento social que suele plantear reivindicaciones justas.
La Unión Sindical Obrera de la Industria del Petróleo, por ejemplo, denunció que detrás del bloqueo que provocan algunos camioneros está Henry Cárdenas, el presidente de Fedetranscarga, que agrupa a algunos transportadores puesto al servicio del uribismo, en alusión al expresidente Álvaro Uribe (2002-2010).
Según alegó esa organización obrera, Cárdenas ahora convoca a un paro político no tanto para mantener el subsidio que el gobierno de su aliado Iván Duque (2018-2022) le regaló, sino para generar pánico y atacar al gobierno de Petro.
En tanto, la Central Unitaria de Trabajadores de Colombia, que representa a cerca de 500 mil trabajadores, alertó en un comunicado que el paro nacional camionero está encaminado a generar la mayor ingobernabilidad, y así crear las condiciones propicias para que se acentúe un Golpe de Estado.
(Con información de PL)
El gobierno del Cambio que en Colombia preside Gustavo Petro Urrego, tiene muchos simpatizantes, pero también adversarios violentos y enemigos. Por primera vez en Colombia un presidente de izquierda realiza acciones y propuestas para mejorar la vida de los pobres. Esa acción ha generado el odio clasista de los reaccionarios. Atentamente, Fernando Acosta Riveros, desde México.