Cargando...Ya casi cerrando el mes de agosto, y luego de la disipación de Ernesto como ciclón tropical, el panorama ciclónico se mantiene calmado, aunque con señales de que podría estar despertando, ya que en la mañana de este martes, 27 de agosto, el Centro Nacional de Huracanes, prevé aunque con una probabilidad todavía baja, la formación de un ciclón tropical lentamente a partir del final de semana o comienzos de la otra.
Un despertar tan esperado, que va avivando polémicas. Por un lado los pronósticos de distintas agencias e instituciones emisoras, incluyendo el emitido por el Instituto de Meteorología, en la actualización que hacen habitualmente “a mitad de temporada”, ratifican las condiciones para que sea muy activa.
Apoyados en estos pronósticos, agencias como Accuweather prevén un septiembre explosivo, con formación de 6 a 10 ciclones, y es que realmente para cumplir el pronóstico previsto, el resto de la temporada tendría que comportarse muy por encima de lo normal o incluso extenderse más allá de lo habitual. Por otro lado el retraso en el establecimiento de las condiciones de “La Niña” incrementa la incertidumbre de que se cumplan las predicciones y a su vez produce la aparición de informaciones que teorizan del porqué no ha sido tan activa la temporada.
Muchas de ellas reproducen publicaciones en las que se habla de un enfriamiento brusco de las aguas del océano Atlántico, que está ocurriendo, pero no precisamente en la zona de desarrollo de los ciclones tropicales, sino más al sur, sobre el ecuador.
Sin embargo este enfriamiento pudiera jugar su papel modulador de la actividad del resto de la temporada. Ya la ciencia dirá la última palabra más adelante sobre los efectos de este fenómeno y la naturaleza por supuesto dirá la última palabra en cuanto a la realidad.
Un cierre de agosto “tranquilo”
Una de las preguntas más recurrentes en la última semana ha sido, que tan inusual es que un mes como agosto se haya comportado tan tranquilo, sobre todo pasado el día 20, la fecha en que comienza climatológicamente la parte más activa de la temporada. Y es que sin la formación de Ernesto el día 12, la última decena del mes podría haberse “ido en blanco” sin ningún sistema activo. Aunque claro, queda esperar si otro ciclón tropical “hace la raya” antes del último día del mes, aunque bien pudiera ocurrir en los primeros días de septiembre, dejando en los libros a Ernesto en solitario, como el único ciclón activo, por solo unas horas del 20 de agosto.
La base de datos de ciclones tropicales de nuestra área comprende de 1851 hasta la actualidad, sin embargo, se considera que anterior a 1966, fecha en la cual la información satelital estuvo disponible con cierta regularidad, puede ocurrir una subestimación de la cantidad de ciclones y sus intensidades, para el caso de aquellos que se desplazaran alejados de tierra.
Sin esa tecnología, sistemas tropicales que no tocaran tierra ni afectaran alguna embarcación, o lo hicieran y no dejaran testigos para contarlo, pasaban inadvertidos parcial o totalmente. Como ejemplo tomemos este resumen de la temporada pasada, en donde una gran parte de los 21 ciclones tropicales formados pudieran haber sido ignorados sino contáramos con la información satelital o de igual manera su trayectoria e intensidad tendrían una mayor probabilidad de ser erróneas.
¿Por qué es necesario aclarar esto? Porque en el análisis que vamos a exponer ahora del comportamiento histórico del final del mes de agosto en algunos casos quedará circunscrito al periodo posterior a 1966, o como lo puede encontrar en algunas informaciones: la era satelital.
En la gráfica siguiente podemos ver el comportamiento de los sistemas que estuvieron activos entre el 20 y el 31 de agosto en los año de 1966 hasta 2023. En ella destacan 1997 y 2022, las únicas dos temporadas en que ningún organismo estuvo activo en ese periodo. Esto ha ocurrido en otras 28 temporadas ciclónicas, pero todas anteriores a 1966, por lo que solo lo mencionamos como ejemplo.
El año con mayor cantidad de sistemas activos fue precisamente 2023, del cual mostramos el mapa resumen, con 7 ciclones. Le siguen con 6 los años 1933, 1995, 2011 y 2021 y el 2012 con 5 ciclones. Todos en esa lista fueron años muy activos con más de 19 ciclones tropicales. Es curioso por otro lado que los años 2005 y 2020, en los cuales se ha alcanzado la mayor cantidad de ciclones, solo estuvieran 3 organismos ciclónicos activos, aunque no podemos olvidar que estas temporadas llegaron al 20 de agosto con 10 ciclones en su haber.
Esta conducta histórica apoya la tesis de que es difícil que se cumplan los pronósticos de hiper-actividad, aunque pueden los números quedar por encima de la cantidad promedio de ciclones.
Mezclando un poco este comportamiento histórico, del cual el 2024 no ha sido el mejor exponente, con lo que nos pudiera esperar en los días restantes hasta el 10 de septiembre, si sigue la pauta histórica vamos a ver como se ha comportado ese periodo.
En la gráfica podemos ver como en ninguna de las 58 temporadas contempladas ha estado ausente de actividad ciclónica. En las 173 temporadas que aparecen en los registros, solo en 9 de ellas no hubo ciclón tropical activo, en todos los casos anteriores a 1941, año en que por última vez se vio este comportamiento, aunque como explicamos, en fechas previas a 1966 la confiabilidad de los datos es menor. En 22 ocasiones se ha formado o desarrollado un ciclón tropical, algo que solo ha ocurrido en la era satelital en los años 1992 y 1997. En 23 años del periodo no se ha visto ningún huracán, 6 de esas ocasiones posteriores a 1966, siendo el 2013 la última vez que ocurrió.
En cuanto a los años más activos entre el 20 de agosto y el 10 de septiembre, vemos en la gráfica que en los años 1971, 1988, 2011 y 2023 hubo 9 ciclones tropicales, los que han sido precisamente los años de mayor actividad histórica desde 1851. Le sigue 1933 con 8 organismos y el grupo conformado por 1936, 1987, 1995, 2012 y 2021 con 7. Como es lógico, repiten algunos del análisis anterior y en todos los casos de la lista, la temporada terminó con 17 o más ciclones.
Los años con mayor cantidad de huracanes en el periodo son 1893, 1950 y 2012 con cinco y en 11 ocasiones se vieron 4 huracanes. Es curioso que en 4 temporadas listadas como de las de mayor cantidad de sistemas totales: 1936,1971, 1987 y 1988, el número de huracanes no llegara a 3.
Así que nos queda esperar qué nos enseñe esta temporada, recordando que el periodo por venir ha resultado históricamente en afectaciones a Cuba, como podemos ver en la imagen que encabeza esta entrega, con 25 ciclones. (Tomado de Cubadebate)
