El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, abandono hoy la campaña por la reelección en medio de la presión para que saliera de la contienda que podría costar caro al partido el 5 de noviembre de continuar en esta.
Era un secreto a voces, pero solo faltaba el cuándo: hoy Biden, anunció que no se presentará a la reelección en medio de una presión por su salida, imposible de contener.
El pobre desempeño de Biden el pasado 27 de junio durante el debate presidencial con su rival republicano, Donald Trump, donde él dijo tuvo “una mala noche”, fue el detonante.
En una carta que publicó en su cuenta de la red social X señaló: «Y aunque mi intención ha sido buscar la reelección, creo que lo mejor para mi partido y para el país es que me retire y me centre únicamente en cumplir con mis obligaciones como presidente durante el resto de mi mandato».
Explicó que hablará “a la Nación a finales de esta semana con más detalle sobre mi decisión».
En otro mensaje en la propia plataforma, Biden brindó su «pleno apoyo y respaldo» a su vicepresidenta Kamala Harris, para la candidatura por el Partido Demócrata, de quien dijo hace pocos días que estaba perfectamente calificada para ser presidenta.
Al menos 35 demócratas del Congreso pidieron públicamente la salida de Biden de la contienda, una presión creciente apoyada además por casi todos los principales medios de prensa de Estados Unidos.
Entre los miembros del Capitolio que llamaron a capítulo al presidente están el senador Sherrod Brown y los representantes Adam Schiff y Jamie Raskin.
También el líder de la mayoría demócrata del Senado, Chuck Schumer, y el expresidente Barack Obama, al parecer expresaron su preocupación de que el camino de Biden hacia la victoria se había estrechado.
Algunos informes señalaban que la campaña de Biden esperaba recaudar sólo el 25 por ciento del dinero de los donantes que originalmente había proyectado recaudar en julio.
La decisión se produce a un mes de la celebración en Chicago, Illinois, de la Convención Nacional Demócrata, donde él sería nombrado oficialmente el candidato de esa fuerza política.
El Presidente Biden, de 81 años, no pudo revertir el creciente sentimiento dentro de su partido de que era demasiado frágil para servir y estaba destinado a perder ante Trump en noviembre.
(Con Información de PL)