Ganadero por tradición, Carlos Isel Hidalgo Aguilar es de los productores que ostentan desde hace cinco años la condición de vanguardia nacional en la provincia de Camagüey.
En la finca El Maguey, perteneciente a la Cooperativa de Créditos y Servicios (CCS) Rafael Guerra Vives, del municipio de Najasa, este agramontino sabe aplicar muy bien lo que considera el «ABC» de la ganadería: el agua, la comida y el manejo.
Con esa premisa, comenta que desde hace un tiempo dispone de una nueva vaquería, donde tiene 50 vacas apartadas en cuarentena para poner igual cantidad de embriones de la raza Gyr.
Dentro de poco más de un año, Hidalgo Aguilar espera que nazcan las crías, las cuales proceden de una de las mejores genéticas del mundo para la obtención de carne y leche.
Mientras tanto, destacó que en la actualidad la finca, con seis caballerías en explotación, funciona también como un proyecto de desarrollo local para la producción de alimentos que benefician a círculos infantiles y de abuelos, así como hospitales y otras instituciones sociales.
En estos momentos, los planes marchan bien, apuntó, pues entregan diariamente alrededor de 350 litros de leche, cifra que deberá incrementarse en esta época del año.
Mantener rendimientos necesarios para asegurar renglones estratégicos para la provincia, ha sido posible, además, con la inclusión de la finca en el proyecto Mejora del potencial de producción de la leche de vaca mediante la introducción de un programa de manejo de la salud en los rebaños lecheros de Camagüey que impulsa la Universidad de Camagüey Ignacio Agramonte Loynaz.
La experiencia acumulada por Carlos Isel durante años le ha permitido integrar el Consejo Nacional de la Asociación Nacional de Agricultores Pequeños (ANAP) y recorrer varias provincias del país para nutrirse de otras prácticas que como las suyas beneficien a la ganadería en tiempos muy complejos para el país, donde a su juicio se necesita ponerle alma, corazón y vida a esa actividad socioeconómica.