La afiliación sindical del sector no estatal preocupa y ocupa a la Central de Trabajadores de Cuba (CTC) en Holguín.
Sumar a los nuevos actores de la economía al movimiento sindical no es mero capricho sino, la voluntad de llevar hacia esas fuerzas la cultura laboral, jurídica, económica y política que promueve la CTC.
Sin embargo, de acuerdo con datos ofrecidos por esa organización, al cierre del mes de abril solo se contabilizaban en la oriental provincia 100 mipymes sindicalizadas de las 335 en plan, mientras el panorama entre los trabajadores por cuenta propia era aún más preocupante.
El tema ha sido objeto de análisis en las recientes conferencias municipales 22 Congreso realizadas en el territorio y de ellas han salido experiencias y consejos que bien vale la pena que se multipliquen entre la masa laboral.
Consyba, un buen ejemplo
Entre los buenos ejemplos al respecto resalta el expuesto por el delegado municipal de la Conferencia de Calixto García Yoander Batista Álvarez, socio único de la mipyme Consyba, especializada en construcción y ejecutora de actividades secundarias como la producción de helado y el arrendamiento interprovincial de transporte.
Esa empresa, con dos años y medio de creada, ha logrado conformar una sección sindical con el 61 por ciento de su fuerza laboral, que a su vez está compuesta por un 80 por ciento de trabajadores que en su momento no tenían vínculo laboral o no habían trabajado nunca, lo cual Batista Álvarez considera un paso muy importante.
El empresario destacó que afiliarse al Sindicato de la Construcción les ha proporcionado acompañamiento desde esa estructura y les ha permitido junto a sus 54 trabajadores formar un modelo de empresa atemperada a lo que necesita hoy el país, con un rol que va más allá de lo económico e impacta positivamente el entorno local, a través de la disciplina y el compromiso con la Revolución.
Afirma que lo logrado hasta ahora en materia de afiliación es resultado también del trabajo mancomunado de los núcleos del Partido y de la Unión de Jóvenes Comunistas organizados en Consyba, aunque subraya que aún falta trabajo por hacer en pos de la sindicalización del resto de los trabajadores.
Su afán como líder de la mipyme de aglutinar a su fuerza de trabajo bajo la buena sombra del movimiento sindical se debe a que está convencido de que la CTC «es el eslabón gracias al cual no nos perdemos o dividimos por ser privados, sino que nos convertimos en una sola cosa: trabajadores. enfocados en tratar de rehabilitar la economía y de sacar al país adelante».