La prensa gambiana se hizo eco este miércoles 22 de mayo del llamado internacional a eliminar a Cuba definitivamente de la lista espuria del gobierno de Washington de países patrocinadores del terrorismo.
En un artículo a media página, el periódico Foroyaa resalta que congresistas demócratas de EEUU aplaudieron esta semana que la Casa Blanca admitiera la cooperación de la isla caribeña en la lucha contra el terrorismo.
El referido diario de esta nación del occidente africano señala que en una declaración conjunta los congresistas dieron la bienvenida a la noticia de la administración de Biden de excluir a Cuba de una relación de Estados que “no cooperan plenamente” en el enfrentamiento al terrorismo.
Agrega que el pasado 15 de mayo el jefe de la diplomacia estadounidense, Antony Blinken, eliminó a Cuba de esa unilateral y arbitraria lista de naciones.
Foroyaa añade que la noticia circuló de inmediato en medios de prensa y redes sociales, causando confusión porque no pocos pensaron que, finalmente, Biden había escuchado el reclamo casi universal de que la mayor de las Antillas sea retirada de la otra lista, igual arbitraria e ilícita: la de Estados patrocinadores del terrorismo.
Al respecto, el diario subraya que lo que hizo Blinken fue modificar el criterio respecto a los que “no cooperan”.
El artículo incluye que el canciller cubano Bruno Rodríguez Parrilla escribió en su cuenta en X que EE.UU. acaba de admitir lo que es conocido por todos: que la isla colabora plenamente con los esfuerzos contra el terrorismo.
Rodríguez Parrilla apuntó que “debería cesar toda manipulación política del tema y poner fin a nuestra arbitraria e injusta inclusión en la lista de países patrocinadores del terrorismo”.
Por su parte, el cotidiano The Standard difunde en sus ediciones impresa y digital de hoy una nota de felicitación de amigos gambianos por el aniversario 45, este 19 de mayo, del establecimiento de las relaciones diplomáticas entre ambas naciones hermanas, y en la cual hacen un llamado a EE.UU. a eliminar de una vez por todas a Cuba de la citada lista.
Afirman que mantener al archipiélago del Caribe en ese listado es “una flagrante invención de la falsedad de Washington, básicamente una tapadera para justificar el bloqueo y las sanciones ilegales e injustificadas que han sido inútiles durante más de seis décadas”, escribió The Standard.