Al intervenir en una mesa redonda dedicada al derecho soberano de los pueblos a escoger su camino, el diplomático afirmó que la isla caribeña enfrenta desde hace más de 60 años un cerco económico, comercial y financiero de Washington, precisamente por ejercer ese derecho a la autodeterminación.
“No es sencillo para un pequeño país construir este camino frente a un gran imperio, pero seguiremos venciendo», advirtió en el evento, que en la sede del PCF atrajo a invitados de organizaciones progresistas de África, América Latina, Asia y Europa.
De acuerdo con Vaillant, el triunfo de la Revolución el 1 de enero de 1959 representó para Cuba la oportunidad de alcanzar y consolidar su plena soberanía e independencia, un hecho que no acepta el poderoso vecino del Norte.
Son conquistas que hemos tenido que defender en más de seis décadas de constante agresión, con un bloqueo que afecta a la población y genera muchas dificultades, expuso.
El embajador cubano aseveró que pese a tanta hostilidad estadounidense, la nación antillana sigue firme en la construcción de un proyecto social propio y mantiene su compromiso con la solidaridad internacional.
En la inauguración de la conferencia de paz, el responsable de las Relaciones Internacionales del PCF, Vincent Boulet, reiteró el rechazo de la organización al bloqueo estadounidense que sufre la isla y a su inclusión en la unilateral lista de Washington de países patrocinadores del terrorismo.
Boulet recordó que el año pasado los comunistas franceses lanzaron una campaña de apoyo a Cuba frente a las consecuencias del cerco y de su carácter extraterritorial.