La CELAC ratifica su vocación pacifista (+Audio)

Este martes el Presidente de la República de Cuba participó en una Cumbre Extraordinaria de Jefas y Jefes de Estado y de Gobierno de la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (CELAC), realizada de manera virtual y convocada por la mandataria de Honduras, Xiomara Castro, en su condición de Presidenta Pro Tempore de dicha organización, como rechazo a la violenta irrupción que llevaron a cabo las autoridades de Ecuador en la Embajada de México en Quito, el pasado 5 de abril.

“Cuente México con nuestro firme apoyo en las acciones que emprendan ante este inaceptable quebrantamiento del Derecho Internacional”, subrayó el Primer Secretario del Comité Central del Partido Comunista y Presidente de la República de Cuba, Miguel Díaz-Canel Bermúdez, al participar en la mañana de este martes en una Cumbre Extraordinaria de Jefas y Jefes de Estado y de Gobierno de la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (CELAC).

El evento, realizado de manera virtual, fue convocado por la mandataria de Honduras, Xiomara Castro, en su condición de Presidenta Pro Tempore de dicha organización, como rechazo a la violenta irrupción que llevaron a cabo las autoridades de Ecuador en la Embajada de México en Quito, el pasado 5 de abril.

Ese lamentable suceso, que ha tenido el rechazo mayoritario de la región, constituye una flagrante violación de la Convención de Viena sobre relaciones Diplomática, el derecho de asilo, la soberanía de México y otras normas de Derecho Internacional.

La CELAC, y los países representados en ella, enfatizó el Jefe de Estado cubano, tenemos la “obligación de defender, de manera firme y sin titubeos, el Derecho Internacional, dejando absolutamente claro que la violación de sus principios no se justifica bajo ninguna circunstancia”.

De ahí el énfasis puesto en sus palabras para que se respete el Derecho Internacional, como condición indispensable para garantizar la convivencia pacífica. “Es también premisa necesariapara sostener la unidad en nuestra diversidad. Es requisito imprescindible para avanzar hacia la ya impostergable integración”, significó.

Lo ocurrido, dijo, no solo impacta muy negativamente en las relaciones bilaterales entre México y Ecuador. Afecta a todos los países deesta región y a la comunidad internacional en su conjunto.

“De nuestra actuación ahora, dependerá en buena medida que hechos repudiables como este no vuelvan a ocurrir en América Latina y el Caribe.

“Aceptar o callar ante el inaceptable comportamiento del Gobierno de Ecuador sentaría un precedente muy grave y peligroso”, consideró.

Tal y como manifestó pocas horas después del asalto a la Embajada mexicana en Quito, el Presidente Díaz-Canel reiteró esta mañana“toda nuestra solidaridad al hermano pueblo mexicano, al querido presidente Andrés López Obrador, a la secretaria Alicia Bárcena y al Gobierno de México”.

UNIR VOCES EN DEFENSA DE LA PAZ

“Los estados miembros de la CELAC, reunidos en la Cumbre Extraordinaria, condenamos enérgicamente la irrupción violenta de las fuerzas de seguridad de Ecuador en las instalaciones de la Embajada de los Estados Unidos Mexicanos, y el uso desmedido de la fuerza, al secuestrar al ex vicepresidente ecuatoriano Jorge Glas”, dijo Xiomara Castro en su condición de Presidenta Pro Tempore de la organización regional, al dejar oficialmente inaugurada la Cumbre.

Rechazamos este acto, valoró, que vulnera la convivencia pacífica de nuestros estados y sienta un precedente nefasto. Es nuestro compromiso desde la CELAC, destacó, consolidar la región como Zona de Paz y que las diferencias se resuelvan por la vía del diálogo.

Sumamente complejo resultó el análisis del tema durante la jornada de este martes, en la cual la primera intervención corrió a cargo del mandatario mexicano Andrés Manuel López Obrador, quien calificó el suceso como una “flagrante violación a nuestra soberanía y al Derecho Internacional”.

Nuestra postura es conocida, recordó: “Interpusimos una denuncia en la Corte Internacional de Justicia para solicitarque se expulse de Naciones Unidas a Ecuador, en tanto no se pronuncia por la no repetición de este hecho vergonzoso; y lo segundo, que se defina un procedimiento a partir de este caso, para que cualquier Estadoque actúe de la manera como lo hizo Ecuador, el Tribunal de Justicia presente a la Asamblea General de la ONUuna resolución de expulsión definitiva”.

“Si no hacemos esto, no vamos a poder vivir en un mundo regido por normas, por leyes”, consideró, para finalmente agradecer “la solidaridad de la mayoría de los pueblos y gobiernos de la región”.

Enérgica resultó también la condena hecha por el Presidente de Colombia, Gustavo Petro, quien instó al Gobierno de Ecuador a pensar en los pueblos de América Latina, pues actuando así parece que no viviéramos en un mundo democrático, sino con pasos agigantados hacia la barbarie.

En tanto, el Primer Ministro de San Vicente y las Granadinas, Ralph Gonsalves, aseguró que su país “deplora las acciones del Gobierno ecuatoriano, que han sido ilegales, subversivas de la Ley Internacional y la soberanía de México, y han violentado la Ley con relación a la inviabilidad de los espacios diplomáticos”,

Más adelante, y con suma tristeza, el mandatario brasileño, LuizInácio Lula da Silva, catalogó de “inaceptable los sucesos del pasado día cinco de abril, que no afectan solo a México, sino a todos nosotros”.

“Nada justifica la escena que sucedió en Quito y debemos buscar soluciones desde nosotros mismos para que la CELAC pueda ser el organismo de concertación de nuestra región”, refirió.

“Ni en los peores tiempos de la dictadura había ocurrido un hecho así, esto es inaceptable y no solo afecta a México, nos afecta a todos. Rechazamos estas acciones. Nos apegamos al derecho internacional. América Latina tiene una tradición en derecho humanitario y de asilo”, acotó el mandatario del gigante suramericano.

Poco después, el presidente venezolano, Nicolás Maduro Moros, anunció el retiro inmediato de su personal diplomático de Ecuador y reiteróla solidaridad con el pueblo y Gobierno de México ante los lamentables sucesos ocurridos en su Embajada en Quito.

Este, enfatizó, es “nuestro espacio para ventilar de manera dialogante y pacífica las diferencias que de diversa índole podamos tener”, y seguidamente enfatizó en la “necesidad de que reafirmemos posturas de paz y de dignidad”.

Al hacer uso de la palabra el presidente de Bolivia, Luis Arce Catacora, dejó clara la condena de su país “a cualquier tipo de violación del Derecho Internacional, que no es una condena contra los pueblos, sino contra gobiernos que intenten afectar la paz, la unidad y la integración de nuestros pueblos”.

“Hoy más que nunca debemos estrechar lazos por esa segunda y definitiva independencia que haga de nuestra región la Patria que soñaron nuestros libertadores, un territorio de paz, de diálogo, de unidad, contrario a todas las imposiciones hegemónicas”, significó.

Desde Ecuador, en nombre de su Gobierno,la canciller Gabriela Sommerfeld, intentó descalificar esta Cumbre Extraordinaria de la CELAC y emitió acusaciones contra México, por una supuesta intromisión en los asuntos internos de Ecuador, planteamientos que fueron rechazados por los participantes en el encuentro, calificado por muchos como necesario e impostergable.

Las intervenciones, mayoritariamente, ratificaron, de manera general, la vocación pacifista de la CELAC en función del diálogo, encargada de seguir buscando el equilibrio entre la unidad y la diversidad que caracteriza a sus estados miembros.