México enviará al secretario general de la ONU, António Guterres, un reporte sobre la crisis diplomática con Ecuador, agravada con la ruptura de los lazos formales, informó hoy la secretaria de Relaciones Exteriores Alicia Bárcena.
La Canciller afirmó que no existe ninguna justificación para que las fuerzas de seguridad del país suramericano irrumpieran en la embajada mexicana en Quito, ni agredir físicamente al personal diplomático y agraviar su dignidad, en referencia a los sucesos del sábado anterior.
“Si Ecuador tenía una interpretación diferente a la de México respecto a las convenciones de asilo de Viena, sobre las relaciones diplomáticas. Sin embargo, dejó de recurrir en todo momento a procedimientos pacíficos, como lo establece la carta de la Organización de las Naciones Unidas o el pacto de Bogotá y no lo hicieron”, dijo.
Según precisó, actualmente avanzan las diferentes acciones diplomáticas del país a raíz del incidente y está en proceso de elaboración la demanda que presentará contra Ecuador ante la Corte Internacional de Justicia para denunciarlo por violaciones al derecho internacional.
Bárcena explicó que pidieron a las autoridades de Quito salvaguardar todos los bienes de la embajada e instruyeron a las representaciones en Chile, Bolivia y Perú atender a los mil 600 connacionales y 30 empresas que permanecen en suelo ecuatoriano.
Resaltó el respaldo de la comunidad internacional ante el agravio, la condena enérgica de 20 países latinoamericanos, 10 europeos y varios organismos multilaterales, así como las reuniones convocadas por la Comunidad de Estados Latinoamericanos y del Caribe para analizar los sucesos.
El sábado anterior la policía de la nación suramericana ingresó por la fuerza a la embajada mexicana para capturar al exvicepresidente Jorge Glas, quien solicitó previamente asilo político al Gobierno de Andrés Manuel López Obrador.
Sobre el político pesa una orden de aprehensión en su país por presunta malversación de fondos en la reconstrucción de dos provincias afectadas por un sismo.
Aparte de la repulsa internacional al suceso, México y Nicaragua rompieron relaciones con Ecuador y el presidente colombiano, Gustavo Petro, anunció acciones para que la Corte Interamericana de Derechos Humanos expida medidas cautelares en favor de Glas, a quien se le violó de manera bárbara su derecho al asilo.
Otros organismos de la región igualmente convocaron a encuentros de urgencia con ese tema en agenda y las consecuencias para Ecuador.