La equidad de oportunidades para acceder al estudio, el trabajo, el deporte y la cultura se encuentra entre los beneficios de los 2 386 afiliados a la Asociación Cubana de Limitados Físico – Motores (Aclifim), de ellos 915 hombres, 1 351 mujeres, 74 niños y 46 niñas, del Municipio Especial Isla de la Juventud.
Este siete de marzo esta organización no gubernamental sin fines de lucro y con personalidad jurídica propia, pasó revista a los aciertos y desaciertos del pasado año, en su Asamblea de Renovación y/o ratificación de mandatos.
La jornada, dedicada a los aniversarios 69 de la excarcelación de los Moncadistas del mal llamado Presidio Modelo, el 44 de la fundación de la ACLIFIM Nacional, el 43 de esta organización en la Isla y al 7mo Congreso de esta fuerza, centró su análisis en cómo los integrantes de las 11 organizaciones de base, agrupados en los consejos populares del territorio, pueden disfrutar de una plena igualdad en todos los ámbitos sociales.
Reunidos en el teatro del Centro Municipal de Higiene y Epidemiología los presentes expresó su agradecimiento por vivir en Cuba, donde existe un sistema de justicia social, en el cual la Asociación ha contado desde sus inicios, con el apoyo y la voluntad política del Gobierno, el Estado y organismos e instituciones que hoy se concentran en el Consejo de Atención a las Personas con Discapacidad.
Todo ello a pesar de los contratiempos económicos generados por el bloqueo de los Estados Unidos, cuestión que afecta a la Aclifim con la adquisición de medios de ambulación, entre ellos sillas de ruedas, bastones y andadores.
Referente a estas ayudas técnicas el informe recogía la entrega en los dos últimos años de donación por parte de la sede nacional de dos sillas de ruedas para niños, igual cantidad de andadores y asideros para baños, sin contar lo recibido por Suministros Médicos del territorio.
“En el tema de las muletas y bastones, el taller no ha dado respuesta a todas las necesidades demandadas por falta de financiamiento, se ha cumplido con la confección de prótesis de miembros inferiores, pero la calidad de su confección no es buena, las materias primas no son las ideales y se hace frecuente las devoluciones de las prótesis por roturas” resumía el texto.
En el calzado ortopédico, seguía, “no se les dio respuesta a las solicitudes por financiamiento, solo se están reparando cuando hay material. El tema de las sillas de ruedas es una situación crítica por la alta demanda de nuestros asociados.”
Meritorio mencionar, la entrega de una vivienda en la Comunidad Makinley y tres viviendas en el Polígono en el Consejo Popular de Sierra Caballo, además de la asignación de cuatro subsidios, aún sin conciliación con la Dirección de Vivienda.
El encuentro, presidido por autoridades locales de varios sectores, tuvo como línea central qué más hacer, en busca de integrar a las personas con discapacidad físico-motora a una vida socialmente útil con iguales derechos y oportunidades y lograr así el acceso al trabajo, al estudio, a la cultura y al deporte.
La accesibilidad al medio físico, planteado en reuniones, pero con deudas por solucionar, se incumple el acuerdo 9040 que sustituye el Consejo Nacional de Atención a las Personas con Discapacidad (CONAPED), pero se han realizado gestiones para que se implemente, en busca de promover medidas eficaces para la prevención de la discapacidad y el cumplimiento de los objetivos de igualdad y plena participación en la vida social.
Esta reunión de repaso de la Aclifim representó la evolución de los conceptos acerca del tratamiento a un segmento social que incluye a personas en estado de vulnerabilidad, temática donde Rigoberto García León, fundador de esta organización en el territorio y, además, al frente de la presidencia del Comité Municipal de Implementación para el Turismo Accesible, expresó la inclusión de los pineros en eventos municipales, provinciales y nacionales, ya sea con carácter cultural, deportivo o recreativo.
No faltó en el intercambio el recordatorio para Héctor Tamayo Romero, ex presidente del Comité Ejecutivo de la Aclifim; tampoco el reto para seguir sorteando el criminal bloqueo que afecta grandemente a las personas con discapacidad, privándole de poder obtener, medicamentos, ayuda técnica, artificio para la rehabilitación y nuevos recursos para tratamientos de las escaras a presión y otros recursos indispensables para mejorar la salud.