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Los participantes respaldaron las posiciones audaces que pedían la rendición de cuentas de Tel Aviv y tomar medidas al respecto, como lo hizo Sudáfrica tras demandar a la entidad por su genocidio contra los palestinos.
Bajo el lema «Firmes con Palestina… Estados Unidos es la madre del terrorismo», los yemenitas realizaron varias manifestaciones en apoyo al pueblo palestino y en condena a la agresión norteamericana-británica contra el país.
Mediante una declaración de las marchas de la gobernación de Saada en el norte, los pobladores reafirmaron que los ataques imperialistas no impedirán el apoyo yemenita a Gaza.
En este contexto, miles de jordanos protagonizaron marchas de apoyo en Amán y en todo el Reino, en solidaridad con la resistencia palestina y el pueblo de la Franja.
Según el canal panárabe Al Mayadeen, los asistentes pidieron el cese del doble rasero y la necesidad de enjuiciar a la ocupación por sus masacres contra el pueblo palestino y condenaron el genocidio en el enclave costero.
Los iraníes izaron estandartes y banderas de Palestina, y corearon consignas exigiendo a la comunidad internacional poner fin a la brutalidad israelí en la Franja.
En la ciudad de Qom, los estudiantes de la Hauza religiosa celebraron una vigilia para denunciar el silencio de las organizaciones de derechos humanos ante el empeoramiento de la situación humanitaria en Gaza.
Por su parte, el pueblo bahreiní continúa su movimiento popular para condenar el acuerdo de normalización con Tel Aviv.
Los ciudadanos se manifestaron en la zona de Diraz, al oeste de la capital, en apoyo de Gaza y de rechazo a la agresión sionista.
En este sentido, los manifestantes bahreiníes exigieron la expulsión inmediata del embajador de la ocupación del país y la cancelación del tratado de normalización.
