La prevención, protección y acción para regular el tratamiento de situaciones de discriminación, violencia y acoso en el ámbito laboral -estatal y no estatal-, y garantizar el disfrute de los derechos de trabajo son las premisas que recoge el Decreto 96 Protocolo de Actuación ante Situaciones de Discriminación, Violencia y Acoso en el Ámbito Laboral.
Esa normativa, presentada hoy en la sede del Ministerio de Trabajo y Seguridad Social (MTSS), se dirige a las personas en la búsqueda de empleo, que desempeñan sus funciones en cualquier espacio laboral, e incluso, para los de nuevo ingreso en cursos de capacitación y estudiantes durante sus prácticas preprofesionales, según precisó Ingrid Travieso Rosabal, directora de empleo del sector estatal.
Puntualizó que se aplica en los ámbitos públicos y privados de los centros, áreas de descanso, alimentación, instalaciones sanitarias, desplazamientos, viajes, trayectos habituales entre el domicilio y lugar de trabajo, y demás escenarios laborales.
Manifestó, además, que una vez recibida la queja -anónimas o no-, se activa el protocolo diseñado en la entidad y se procede a la investigación del suceso antes de adoptar cualquier medida.
De comprobarse la veracidad del asunto, se aplicarán las medidas disciplinarias pertinentes establecidas según la ley, agregó.
Ana Adela Rodríguez Duporté, experta en Políticas de la Dirección Jurídica y Relaciones Internacionales del MTSS, indicó que la normativa se aprobó el 13 de septiembre último y se publicó en la Gaceta Oficial no. 66 Extraordinaria del 28 de septiembre.
De conjunto con su entrada en vigor, se ofreció un plazo de 90 días a las instituciones para que establecieran sus protocolos internos, añadió.
En el encuentro estuvieron presentes directivos de diferentes instituciones del país, quienes catalogaron al protocolo como un paso trascendental y favorable en un contexto crucial para el país.
Muy lamentable, que en nuestra sociedad y el Estado «los que aspiran al socialismo» estemos hablando de una actuación al margen de políticas jurídiccionales en los ámbitos públicos y privados de los centros, áreas de descanso, alimentación, instalaciones sanitarias, desplazamientos, viajes, trayectos habituales entre el domicilio y lugar de trabajo, y demás escenarios laborales que den al traste con el amplio cororario de normas, lineamitos, reuniones, despachos, relaciones éticas; todas burocrátizadas y rutinarias en estructuras socio politicas; que pena, todos esos filtros de tiempo humano invertido, se activan a verificarse ante la queja supuestamente marginal de uno de sus integrantes.
Me parece haber entendido que fue Engels quien había rescatado, ideas de Marx y estudios de Morgan referidos al paso perdido de contraponer la barbarie y la civilización; temas de producción y la reproducción de la vida inmediata.
Nuestro Fidel, en ocasiones, revalida bastante la idea de la etapa «prehistórica» si enfocamos la teoría materialista hacia el orden social condicionado por esas dos especies de producción: según el grado de desarrollo del trabajo, de una parte, y de la otra la «familia», en su amplitud histórica que trasciende a los sistemas de parentesco, donde el antagonismo de clase estará vigente mientras no abandonemos los enfoques y herramientas prehistóricos, mientras renovemos las consecuencias del choque de las clases sociales una y otra vez reformadas por el pensamiento «clásico», precisamente cuando nuestros Estado, en ese espíritu renovador cualitativo, potencia las desde entonces unidades territoriales.
Repasemos la lucha de clases contenida en toda la historia escrita. Seguramente advertiremos que el recorrido socialista es un bebé que aun debe amamantarse, continúa siendo el más moderno y corto en siglos de intentos.
No parece que estemos en la hora – tiempo de volver al enfoque pendular que va y viene, incluso aunque alcance su punto más alto, baje con fuerza para circular en torno al eje «prehistorico» que lo amarra , Parecen horas para que nuestra ciencia jurídica ayude a otras a dar ese salto cualitativo y cuantitativo en la espiral por legislar y escribir, de normar la vida inmediata y la nueva por vivir, la socialista, la de las comunas, la de la propiedad social, aún teorica, sin otros apellidos, la del ser humano, y por la que sea simplemente humano más allá del género, color de la piel, tamaño de la nariz, las orejas,la edad, ser sencillamente identificado, promovido por la belleza humana. Algo notoriamente avanzado respecto a teorias que contraponen la barbarie y la civilización.
Gracias