A la una de la madrugada de este domingo cinco de noviembre deben ser atrasados los relojes una hora para restablecer el horario normal en Cuba y coincidir así con los países del hemisferio norte.
La Oficina Nacional para el Control al Uso Racional de la Energía (ONURE), del Ministerio de Energía y Minas, indicó también que en esas condiciones es necesario encender solo las luces y equipos imprescindibles.
Su objetivo básico consiste en fomentar el uso racional de los portadores energéticos como una práctica cotidiana en hogares y centros de trabajo, señaló al referirse al impacto de la medida en todo el territorio nacional.
ONURE dispuso que el horario de verano en la nación entrara en vigor el 12 de marzo pasado, cuando los relojes son adelantados una hora a fin de lograr un mayor aprovechamiento de la luz solar.
La medida es aplicada en un momento del año en que se transita naturalmente a un periodo en que amanece más temprano y oscurece más tarde y por ende aumenta la cantidad de horas de Sol.
Con ello no se gana en cantidad de luz solar, sino que la desplaza (una hora), para acomodarla a horarios de mayor actividad.
La iniciativa en cuestión comenzó su aplicación a escala mundial desde 1974 y permite una reducción significativa de la máxima demanda energética de la llamada hora pico, al no coincidir en gran medida la cocción de alimentos con la iluminación.