Las profundas grietas surgidas en el molino de bolas ML-201, en la Planta de Preparación de mineral de la Empresa Comandante Ernesto Che Guevara, ubicada en Moa, le quitaron el sueño al ingeniero mecánico Novelis de la Cruz Martínez.
“Este es un dispositivo fundamental en el proceso productivo y se encontraba fuera de servicio. Presentaba grietas alargadas, profundas y ramificadas, que se extendían desde la tapa hacia el exterior e interior del muñón”, manifiesta, mientras conversamos en la sede de la Central de Trabajadores de Cuba, en la cual se desarrolló la exposición Creatividad ante el bloqueo, realizada en ocasión de celebrarse el X aniversario del Sindicato Nacional de Trabajadores de Energía y Minas (SNTEM).
Buscar la solución al problema que interfería en los resultados de esta empresa que garantiza la producción de níquel y cobalto, fue una misión que Novelis asumió con la entrega y responsabilidad que siempre le ha puesto a su labor, desde que se graduó como ingeniero, en 1987, en la otrora Unión Soviética.
Hombre sencillo, es de los que piensa que todo tiene una solución. Su actuar cotidiano ha sido prueba de eso. “Nos enfrascamos y todas las grietas que presentaba el molino fueron reparadas. Se logró alargar su vida útil y alcanzar niveles superiores de producción. Desde hace más de un año se mantiene funcionando sin ninguna dificultad”, afirmó.
El impacto económico de la sustitución de importación lograda por Novelis es alto. “Los molinos de bolas con características similares a la del área de molienda de la planta Preparación de Mineral en la actualidad tienen un precio en el mercado internacional aproximadamente de un millón de dólares”, aseguró.
A todos nos afecta
La vida del ingeniero Novelis ha sido bien intensa. Recién graduado comenzó su labor en la proyectada Central Electronuclear de Cienfuegos; después su huella quedaría en la modernización de la Empresa Mixta Moa Nickel S.A. Pedro Soto Alba y la construcción de la Unidad dos de la termoeléctrica Lidio Ramón Pérez, de Felton. También cumplió misión en Venezuela, donde laboró en la reparación de una Termoeléctrica, en el estado de Carabobo.
Siempre ha percibido cómo impacta en los colectivos obreros y en los resultados de las entidades el bloqueo económico, comercial y financiero impuesto injustamente por Estados Unidos a Cuba.
Asegura que esas afectaciones se recrudecieron en los últimos años con la administración de Donald Trump y la continuidad invariable del actual gobierno de Joe Biden.
“La aplicación del Título III de la Ley Helms Burton dificulta el comercio con terceros países y empresarios del mundo, esto ha provocado grandes limitaciones para la entrada de recursos necesarios para los mantenimientos y reparaciones de la industria”, aseveró.
“Resulta difícil adquirir las tuberías, perfiles metálicos para estructuras, chapas de acero, electrodos para soldadura, discos abrasivos, herramientas, pintura anticorrosiva, refractarios, equipos eléctricos, equipamiento minero, entre otros equipamientos”, señala y eso, sin dudas, nos hace daño a todos.
No obstante, los trabajadores no se han quedado cruzados de brazos. Ante las carencias, ha prevalecido el ingenio de los innovadores y racionalizadores, movimiento del cual forma él forma parte.
En la actualidad, el destacado ingeniero labora en la ejecución del puerto de cruceros de La Habana. Sin dudas, su huella quedará en muchos sitios, donde se impone la creatividad.
Acerca del autor
Graduada en Licenciatura en Periodismo en la Facultad de Filología, en la Universidad de La Habana en 1984. Edita la separata EconoMía y aborda además temas relacionados con la sociedad. Ha realizado Diplomados y Postgrados en el Instituto Internacional de Periodismo José Martí. En su blog Nieves.cu trata con regularidad asuntos vinculados a la familia y el medio ambiente.