Dos trabajadores de Cienfuegos, vinculados a los sectores de la industria y la alimentación, recibieron este miércoles el Sello 8 de octubre, la más alta distinción que otorga la Asociación Nacional de Innovadores y Racionalizadores (ANIR) en Cuba.
La ceremonia aconteció en la Empresa Oleohidráulica Cienfuegos, la primera fábrica construida en el territorio sureño por la Revolución, a propuesta de Ernesto Che Guevara.
Luis Jiménez Marrero, reconocido por sus aportes en las faenas de la Empresa Cárnica Cienfuegos, y Francisco Collado Sánchez, con más de 40 años de labor en Olehidráulica, resultaron esta vez los acreedores de la condición en la provincia, entregada simultáneamente a casi un centenar de innovadores cubanos.
Así se rindió tributo a la figura del Che, al cumplirse hoy, 14 de junio, el aniversario 95 de su natalicio.
“En esta industria —contó Collado Sánchez— he realizado varias innovaciones, fundamentalmente en la máquina donde elaboramos cilindros, con el fin de obtenerlos de distintos tipos de diámetro, al margen de las medidas prefijadas por la tecnología”.
La ingeniosidad de los obreros de Cienfuegos fue resaltada por Alexis Gutiérrez Besú, presidente del Buró Provincial de la ANIR, quien elogió el talento y la iniciativa creadora de los miembros de la organización.
“Ello nos ha permitido mantener en funcionamiento fábricas, plantas y talleres, la mayoría dotados de tecnología obsoleta y carentes de piezas de repuesto”, expresó.
Durante el acto se reconocieron también a otra decena de innovadores y racionalizadores, todos con una trayectoria destacada en Olehidráulica Cienfuegos, enclave industrial inaugurado el 9 de octubre de 1963 por idea del Che, bajo el nombre, entonces, de Fábrica de Motores Diesel y de Compresores.