Oraldo Bringa Reyes ama la hora que más brilla porque este guajiro sabe que quien madruga el amanecer lo ayuda con la fresca no solo a labrar la tierra, sino también a cumplir tareas de la Revolución como la de este domingo para elegir al más capaz como delegado de la circunscripción número 12, a la Asamblea Municipal del Poder Popular en Ciro Redondo, de la provincia de Ciego de Ávila.
El campesino se pone el sombrero de yarey y parte temprano hacia la escuela rural de su terruño, devenida colegio electoral número Uno, donde se desempeña como presidente de la mesa electoral casi desde los primeros comicios populares hace 46 años.
Tanto tiempo al frente de una tarea de gran responsabilidad concuerda con la confianza de sus vecinos que lo designan por sus valores humanos y alto sentido del deber como jefe de vigilancia de los Comités de Defensa de la Revolución, secretario del núcleo del Partido en la zona de defensa y miembro de la Asociación de Combatientes de la Revolución Cubana, entre otros méritos.
Este consagrado hombre combina su labor en unas de las brigadas de mantenimiento de la empresa porcina avileña con la atención, en tiempo libre, a las plantaciones de guayaba en la finca nombrada Santa Rita, desde donde tributa las frutas a la Cooperativa de Créditos y Servicios Nguyen Van Troi, aporte que ha contribuido a que esa base productiva, antes irrentable, haya dado el salto hacia la eficiencia para cosechar hoy utilidades o ganancias.
Así, sin temor a responsabilidades ni agotamiento, ejerció temprano el voto por la Patria y se sentó a la mesa electoral a presidir el sufragio con la confianza en el perfeccionamiento de la gestión de Gobierno en su comunidad campesina El Barrito, donde puede que engendre la maravilla solo el amor.
Acerca del autor
Licenciado en Comunicación Social. Economista y periodista. Escribe sobre asuntos económicos, agropecuarios, de la construcción y la cultura. Multipremiado en concursos de periodismo, festivales de la radio y otros eventos. Atesora las distinciones Félix Elmuza y Raúl Gomez García, los sellos Laureado y 50 aniversario del periódico Trabajadores, y la Moneda Conmemorativa 60 aniversario de la UPEC.