No querían irse, querían trabajar hasta ver una bombilla encendida

Se le veía visiblemente emocionado.

Roberto Hernández, Jefe Técnico de la Brigada de linieros de la Empresa Eléctrica de Sancti Spíritus que laboró en el Consejo Popular La Conchita, de Pinar del Río, dejó a un lado su habitual seriedad.

Su tendencia a escuchar daba paso a un pequeño y sentido discurso en el que decía de sus impresiones sobre los pinareños, de los días trabajados y del esfuerzo realizado por sus compañeros, comprometidos en la recuperación de los destrozos que el Huracán Ian dejó en occidente.

“No querían irse. Querían trabajar al menos hasta ver una bombilla encendida. Y cuando ves ese tipo de reacciones te puedes dar cuenta del compromiso que ellos tienen”.

Terminaba así una etapa importante de trabajo y el pueblo de esa localidad agradecía a todos los integrantes de la brigada, prodigándole una bonita despedida.

Cerca de otro mes de trabajo retendrá a los linieros espirituanos, junto al resto de las otras provincias, en Pinar del Río. El compromiso es de ayudar a devolver la infraestructura que Ian desbastó en el occidente cubano y así poder restablecer el servicio eléctrico. Pero dejan algo más que luces tras ellos: amistad, agradecimiento y cariño infinito en quienes les conocen.

A todos, Gracias. (Yuly Morejón Alfonso / Radio Guamá)