El también analista político, quien acompañó al Partido de los Trabajadores (PT) en la primera vuelta de los comicios, considera posible una perspectiva de cambio en ese país para dar respuesta a los intereses de la sociedad, postergados durante el predominio de la ultraderecha.
“Eso es algo que uno podía percibir en las calles, en las conversaciones con la gente, y es la disposición de la población brasileña a poner fin a la experiencia de Jair Bolsonaro y de optar por Lula”, dijo Osorio.
De acuerdo con el académico, aunque no se puede hacer un pronóstico certero porque toda elección tiene un nivel de incertidumbre, hay hechos claros en el resultado de la primera vuelta del 2 de octubre.
El primero, a Lula le faltó solo alrededor de 1,5 por ciento para imponerse en esa justa; en segundo lugar, el abanderado del PT aventajó con más de cinco puntos, casi seis millones de votos, a Bolsonaro.
Por otro lado, dijo, los candidatos que quedaron en tercero y cuarto lugar ya expresaron su respaldo a Lula.
“A mí me parece altamente probable que en la segunda vuelta esta disposición de cambio que yo observé en la población brasileña, se va a traducir en una victoria para Lula y el Partido de los Trabajadores”, aseguró.
Interrogado sobre el significado para América Latina de un virtual triunfo del exlíder obrero, consideró que sería una derrota a las nuevas formas de la extrema derecha que se han ido imponiendo no solo en la región, sino a lo largo del mundo.
Una victoria de Lula contribuirá a que en el conjunto de la región puedan abrirse paso nuevos tiempos de cambios, afirmó.
Recordó que durante el período de mandato de Lula (2003-2011) hubo expansión económica, estabilidad, prosperidad e inclusión social y millones de personas salieron de la pobreza y marginalidad. Nada de eso ocurrió con Bolsonaro, declaró.
A la pregunta sobre si considera que hay un cambio de ciclo en la región, expresó que América Latina se ha ido poblando de gobiernos progresistas y citó los casos recientes de Colombia y Chile.
«Una victoria de Lula en Brasil puede contribuir en forma muy decisiva a la articulación del campo progresista en la región», concluyó el exministro chileno.
(Tomado de PL)