Como muestra del compromiso del campesinado cubano con los destinos de la nación y su estrecha alianza con la clase obrera, la Asociación Nacional de Agricultores Pequeños (ANAP) en Las Tunas brinda sus aportes para mitigar las secuelas del azote del devastador huracán Ian en la occidental provincia de Pinar del Río.
“La organización, dijo a la prensa Roberto Medrano Ledesma, presidente de la ANAP en la provincia, ha promovido en sus asociaciones de base la ayuda a los damnificados y la respuesta no se ha hecho esperar.”
Y fruto del humanismo y la humildad que caracteriza a los hombres y mujeres de nuestros campos son las donaciones realizadas para sumarlas a los esfuerzos de todo el país encaminados a paliar las carencias generadas por el embate del poderoso meteoro a sus compatriotas y colegas de esa regione.
Entre las acciones, el dirigente campesino mencionó los 43 mil pesos recolectados con ese objetivo por asociados a las cooperativas de créditos y servicios (CCS) El Vaquerito y Rogelio Rojas, del municipio de Colombia; y, la entrega de productos, incluida una canastilla, realizada por afiliados del municipio de Jesús Menéndez.
También enviaron más de 10 toneladas de productos agrícolas como viandas, cocos, carbón vegetal, conservas de frutas y vinagre, entre otros; y, los trabajadores de la sede central conformaron una valija con ropa, calzado, artículos de aseo personal y limpieza, medicamentos y utensilios de cocina dirigidas a las familias que perdieron sus casas y casi todos sus bienes.
Según afirmó Medrano Ledesma, en las cooperativas fueron seleccionados 10 carpinteros y sus respectivos ayudantes que forman una brigada que espera decisiones para marchar hacia esa zona siniestrada y brindar su ayuda en la rehabilitación de la superestructura dañada por la fuerza de los vientos del fenómeno hidrometeorológico.