HANOI, Vietnam.–Con la firma de diez acuerdos, que incluyen memorandos de entendimiento, carta de intención y contrato de suministro y distribución, cerró el Foro Empresarial Cuba-Vietnam realizado este viernes, como parte del programa de la visita oficial del miembro del Buró Político y primer ministro, Manuel Marrero Cruz.
Al inaugurar el evento, al que acudieron representantes de más 70 empresas locales, el Jefe de Gobierno cubano aseguró que Vietnam se consolida como el principal inversionista y el segundo socio comercial de Cuba en la región asiática, pues el país caribeño concede alta prioridad a dichos vínculos y favorece la presencia cada vez mayor del empresariado vietnamita.
Uno de los objetivos principales de la visita, la primera en su condición de Primer Ministro, es –según subrayó– promover y elevar la eficacia de la cooperación económica y mantener el apoyo continuo a la estabilidad y diversificación de la relación comercial bilateral, tal como quedó plasmado en la Declaración Conjunta Cuba-Vietnam, emitida en septiembre de 2021.
De acuerdo con Marrero Cruz, «hay fortalezas que propician un ambiente favorable para la consolidación de los vínculos comerciales y de inversión, como la solidez de nuestra relación, la complementariedad de nuestras economías, la estabilidad política, la fuerza de trabajo calificada y, al mismo tiempo, un importante control de la COVID-19».
Entre las medidas que pueden resultar atractivas para los empresarios vietnamitas, señaló la apertura del comercio mayorista y minorista a la inversión extranjera. Y, asociados a ello, Cuba tiene dos incentivos fundamentales: una infraestructura subutilizada y una importante demanda solvente insatisfecha.
Respecto a la Zona Especial de Desarrollo Mariel (ZEDM), significó que, con la presencia de la empresa vietnamita Vimariel como concesionario, se confirma cual enclave estratégico para la inversión en Cuba, que es hacerlo en un puente hacia el resto de América Latina y el Caribe.
Los proyectos de energías renovables, turismo y producción alimentaria, sectores claves para los planes cubanos de desarrollo económico, coinciden con los de mayores potencialidades para incrementar la presencia del empresariado vietnamita, resumió Marrero Cruz.
El ministro de Comercio Exterior y la Inversión Extranjera, Rodrigo Malmierca Díaz, presentó la nueva cartera de oportunidades de negocios, la cual contempla 678 proyectos; y la oferta exportable cubana, con más de 350 bienes y servicios.
Asimismo, Ana Teresa Igarza, directora general de la ZEDM, abundó en las ventajas de invertir allí, e informó que Vietnam ocupa el segundo lugar en la emisión de negocios hacia dicho enclave.
Más adelante, durante la firma de los acuerdos, el Grupo Empresarial BioCubaFarma, el Centro de Ingeniería Genética y Biotecnología, y la ZED Mariel fueron las entidades cubanas representadas, en áreas que van desde la cooperación en materia farmacéutica y biotecnológica, la producción de papel Tisú, el desarrollo de un proyecto agrícola ganadero y la generación eléctrica en parques solares fotovoltaicos.
LA SOLIDARIDAD EN EL ESCENARIO EMPRESARIAL
Un encuentro con miembros de la Misión Estatal cubana en Vietnam, representantes de organizaciones de solidaridad y cubanos residentes aquí, también tuvo lugar este viernes con la presencia del Primer Ministro y la delegación que lo acompaña.
Además de actualizar sobre la compleja situación que atraviesa el país, Marrero Cruz pidió a los jefes de carteras que informaran sobre los resultados de las negociaciones sostenidas con sus contrapartes vietnamitas, así como con otras instituciones afines.
José Angel Portal Miranda, ministro de Salud Pública, detalló los ámbitos de cooperación en los cuales se avanzó, entre los que destacan la comercialización de productos biotecnológicos, la formación académica, el intercambio entre instituciones científicas y la ampliación de la colaboración médica.
El titular de Agricultura, Ydael Pérez Brito, hizo referencia a los encuentros con el sector científico, y el progreso de los proyectos sobre arroz, café, producción de maíz y acuícola.
Luego de las intervenciones, sobrevino un aluvión de mensajes vietnamitas de apoyo a Cuba, a su resistencia, de admiración hacia Fidel, de disposición de afianzar la hermandad y de condena invariable al bloqueo.