Cuando la solidaridad se impone

Cuando la solidaridad se impone y sabemos que hay hermanos, de esos que no son de sangre y necesitan de nuestros apoyo, hombres como los granmenses Heriberto Tamayo Navas y Eduar Escalona Sotomayor, no lo piensan dos veces para dar el paso al frente.

El primero, es chofer de carro de servicio de la Unidad Empresarial de Base de Bayamo y dejó bajo el resguardo de su esposa, a su pequeña Victoria que muy pronto estará cumpliendo 11 meses de nacida.

El segundo, Eduar, pasó su cumpleaños 36, este martes 27 de septiembre, en un largo recorrido hasta la provincia Pinar del Rio.

Ambos integran el contingente «Desembarco del Granma» integrado por 60 especialistas entre linieros, mecánicos, choferes, despachadores, energético, personal de aseguramiento, de seguridad y protección, celadores y de recursos humanos pertenecientes a la Empresa Eléctrica de Granma.

Estos hombres, con sus uniformes, cascos y todos los recursos necesarios, dijeron hasta pronto a la familia y salieron para ofrecer sus servicios lejos de casa, en los lugares donde el huracán Ian dejó su huella.

Heriberto y Eduar, junto a sus compañeros llevan como estandarte la bandera de la estrella solitaria que les fue entregada por los principales dirigentes políticos y gubernamentales de la provincia, llevan además en su corazón la convicción de regresar con la tarea cumplida.

A esta gran familia los lidera Geider Mompié Rodríguez, Director de la entidad quien destaca el valor de estos hombres, con vasta experiencia en fenómenos meteorológicos y que no le temen a las duras horas de trabajo, ni a los mosquitos, ni a las condiciones difíciles cuando saben que su aporte es necesario.

También los acompañan Carlos Saborit Frías, Jefe de brigada de trabajo en líneas energizadas, Ernesto Sánchez Montero, Liniero Especializado que trabaja en cesta de Alumbrado y Adonis Fuentes Liens, celador de líneas eléctricas, ellos son la voz de la experiencia hombres jaraneros con muchas historias para contar.

Cada tiene 62 años cumplido y han participado en la recuperación de varios ciclones, dicen que aunque el almanaque pasa, ellos tienen el mismo ímpetu de la juventud.

Sabemos que pronto estarán en casa, narrando las anécdotas de las jornadas vividas, sabemos que pronto Heriberto volverá a abrazar a Victoria y Eduar disfrutará el cumpleaños con los suyos en el costero municipio de Niquero. Pero todos están convencidos que hoy la solidaridad se impone.